No corren buenos tiempos para los agricultores y regantes de la Región. Cuando parecía que podrían tener una buena noticia, con los embalses de cabecera del Tajo muy recuperados, y recibir el doble de agua del Trasvase este mes, los responsables de la gestión del Agua del ministerio de Agricultura les han advertido de que si quieren el agua concedido de la cuenca del Segura tendrán que pagarla por adelantado. Un aval de unos diez millones de euros por 25 hm3 -5 menos que los previstos inicialmente-.
El pasado 1 de marzo, el Ministerio que dirige Isabel García Tejerina publicó en el BOE la cesión de 30 hectómetros cúbicos de agua de la cuenca del Segura a los regantes del Trasvase a consecuencia de la sequía. Ese mismo día se abrió el periodo de alegaciones contra esta decisión. La Vega Baja alicantina en pleno se mostró en contra.
Eran muy malos tiempos para la cabecera del Tajo y se había cerrado el grifo durante varios meses a los envíos para riego, e incluso para abastecimiento.
En el acuerdo alcanzado días antes entre el Ministerio y los regants, con la mediación de la consejería de Agua, Agricultura y Medio Ambiente, la cuenca del Segura cedía el agua a cambio de que los regantes la devolvieran «cuando lo permita la situación de los embalses de cabecera del Tajo lo permita», se explicó entonces.
Pues bien, hace dos días los regantes fueron informados en persona de las nuevas condiciones: deberían abonar a razón de 47 céntimos el metro cúbico de agua prestada -unos diez millones aproximadamente- por si la cuenca necesitaba echar mano de agua desalada si no mejoraba sus existencias y los huertanos se quedaban cortos para próximos riegos.
El presidente del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura, José Manuel Claver, manifestó que «no he visto esa resolución por escrito, y tan pronto como la reciba presentaremos las alegaciones pertinentes en contra».
Los regantes esperan convencer al Ministerio de que no sigan por ese camino, y si persisten, «actuaremos en consecuencia».
Ya ha habido voces entre los regantes del Trasvase que se han mostrado reacios a pagar ese dinero, y que, además, consideran excesivo el precio calculado.
Dos meses esperando
Los regantes del Trasvase llevan dos meses esperando a que la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) acuerde definitivamente dar el visto bueno a la orden de cesión de estos caudales publicada en el BOE.
En el Boletín, al tratase de un decisión de urgencia basada en la extrema sequía que sufría la cabecera del Tajo, sólo se daba un plazo de 10 días para presentar alegaciones. Y desde entonces, el organismo de cuenca está estudiando las que les llegaron. En ese tiempo, los pantanos del Tajo se han recuperado, «pero no podríamos todavía prescindir de ese agua extra», apuntó Claver.
