El presidente de la Comunidad Autónoma, Pedro Antonio Sánchez, no se ha planteado en ningún momento dimitir tras el informe de la Guardia Civil que lo considera presunto responsable de un delito de fraude en la contratación pública. Así lo confirmaron fuentes de Presidencia, que añaden que el jefe del Ejecutivo «está muy tranquilo, porque confía ciegamente en la Justicia y, lo que es más importante, tiene la seguridad de no haber hecho nada irregular».

Sánchez no tuvo ayer ningún acto de agenda y estuvo durante todo el día en el Palacio de San Esteban, donde por la tarde se reunió con los colaboradores más cercanos y analizó el informe de la Guardia Civil sobre el caso Púnica que le afecta directamente. Durante la tarde, cuando se iban conociendo más datos del informe de la UCO, se especuló con que podría presentar su dimisión, pero estos rumores quedaron zanjados a las 20 horas, cuando la Oficina de Prensa de la Comunidad informó de que presidiría esta mañana, a las 10.00 horas, el acto de toma de posesión del nuevo consejero de Fomento e Infraestructuras, Pedro Rivera.

Una vez analizado el informe de la Benemérita, desde San Esteban aseguran que no se contradice la versión que ofreció en un primer momento la consejera portavoz, Noelia Arroyo, en el sentido de que la consejería de Educación jamás contrató los servicios que le ofrecieron las empresas investigadas en el caso Púnica, ni realizó ningún encargo ni, por consiguiente, hubo gasto alguno de dinero público. Sí admiten en el Gobierno regional que hubo reuniones e intercambios de WhatsApp del presidente con uno de los cabecillas de la trama, Alejandro de Pedro, añadiendo que es habitual que un consejero se entreviste con personas que quieren proponer servicios a la Administración. No obstante, insisten en la Comunidad que jamás Pedro Antonio Sánchez dio el visto bueno a un contrato para la mejora de su imagen en Internet. «Se rechazaron sus ofrecimientos, no se necesitaban y no generaban confianza. Se les dio 'largas' durante casi un año y el tiempo ha dado la razón», señalan fuentes del Ejecutivo, que añaden además que han recibido propuestas de otras empresas que no tienen que ver nada con el caso Púnica y que ofrecen servicios parecidos.

En el Gobierno mantienen su disposición a colaborar con la Justicia, tal y como están haciendo hasta el momento, y lamentan que una vez más la figura del presidente de la Comunidad sea juzgada antes de tiempo. «En este país lo que hay que demostrar es la culpabilidad, no la inocencia, pero hay a quienes interesa que estas dudas surjan», apuntan las mencionadas fuentes.

Por su parte, Pedro Antonio Sánchez declaró en una entrevista concedida en la mañana de ayer a Carlos Herrera en la Cadena Cope que «si alguien pudiera demostrar que estoy mintiendo, no daría lugar a que nadie me señale el camino» de la dimisión, a la vez que añadió que «nadie nunca podrá demostrar lo que no existe».

«Lo que se intenta es que surjan dudas y poner en marcha otro tipo de estrategia, la de la calumnia, de la duda, en estos tiempos, dado que hoy para mucha gente el político es presuntamente culpable», lamentó Sánchez.

Acusan de mentir a su asesor

Por otra parte, el informe de la UCO de la Guardia Civil acusa a David Conesa, miembro del equipo de confianza del presidente de la Comunidad, de haber mentido cuando declaró el pasado 6 de abril en calidad de testigo en sede policial por el caso Púnica. Según la UCO, Conesa restó importancia a su relación con estos empresarios y luego se ha conocido documentación que pondría en duda su versión.