40 años y un día. Ese es el tiempo que José Antonio García Baños, histórico dirigente socialista en el municipio de Murcia y exconcejal, ha permanecido como militante del PSOE. Hasta que, el pasado miércoles, recibió oficialmente una comunicación de la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE en la que se le informa de la resolución del expediente que le abrió la dirección regional por una serie de «infracciones» a las normas internas del partido que han desembocado en su expulsión, aunque el afectado asegura que seguirá peleando y recurrirá la ldecisión de la secretaría de Organización del PSOE estatal, que dirige César Luena.

A García Baños, muy próximo al sector de Pedro López, crítico con Rafael González Tovar, se le acusa de una serie de actos de indisciplina, como criticar en Facebook el acto de celebración de los 30 años de la agrupación Murcia Norte, la que él mismo constituyó y dirigió durante más de 30 años, y difundir correos electrónicos entre los militantes para boicotear el evento. Asimismo, se le censura por criticar en las redes sociales, «con un claro menoscabo y desprestigio al partido», la actuación de la Ejecutiva regional la declaración de no idoneidad del que fuera candidato socialista a la alcaldía de Murcia, Pedro López, que fue apartado tras un conflicto con Tovar por la elaboración de la lista electoral en Murcia y sustituido por Gras. También se le reprocha haber hecho uso de las direcciones de correo electrónico de los militantes para difundir propaganda de la candidatura municipal Cambiemos Murcia.

Junto a esto, el expediente relata una serie de hechos que suponen infracciones «muy graves», como vender lotería del sorteo del Niño en nombre de la agrupación socialista Murcia Norte, «sin conocimiento ni autorización» de la Ejecutiva, y la existencia de pagos «de naturaleza exclusivamente personal en la cuenta de la agrupación Murcia Norte». Además, se le acusa «de intentar formar una estructura paralela a la agrupación bajo la corriente interna denominada Izquierda Socialista, realizando reuniones con militantes y movimientos vecinales al margen del partido», señala el expediente, en poder de este diario.

Junto a García Baños, han sido suspendidos de militancia, por un periodo que va desde cinco a 20 meses, otros tres afiliados murcianos, todos en la órbita crítica con la dirección regional.

García Baños, que durante el procedimiento sancionador alegó indefensión, asegura que las infracciones que se le achacan «son burdas, falsas y ridículas» y que puede demostrar que no son ciertas. No descarta acudir a la Justicia ordinaria para intentar revocar su expulsión, de la que culpa «a la Sagrada Familia» (en referencia a Tovar y María González Veracruz) y a la concejala murciana Susana Hernández, quien lo sustituyó al frente de Murcia Norte. «Soy del PSOE y lo voy a seguir siendo, aunque no pague la cuota. Me apena ver cómo el PSOE ha podido llegar a tan poco y cómo esta gente (los dirigentes actuales) a tanto», sentenció.

Respuesta del PSRM

Por su parte, fuentes del PSRM señalan al respecto que «este partido es garantista y por eso, de cinco expedientes abiertos a militantes, dos se han resuelto a favor de los afectados, mientras que otro se dio de baja voluntariamente cuando se tramitaba el expediente». «Los partidos tienen unas normas y, si se incumplen, tienen un sanción», añaden las fuentes, que recuerdan que es el Federal el que decide.