El doctor Fernando Simón, experto en Epidemiología, participa esta tarde en una mesa redonda sobre el virus del zika, organizada por la Fundación de Estudios Médicos (FEM) de Molina de Segura. En el acto también interviene el doctor en Farmacia y virólogo José Manuel Echevarría Mayo, y el jefe de servicio de Microbiología del hospital Virgen de la Arrixaca, Manuel Segovia, quien actuará como moderador.

¿Qué pueden esperar los asistentes al acto de esta tarde?

Mi objetivo es que se entiendan los riesgos a los que están expuestos los ciudadanos y lo que realmente nos debe preocupar. Hay una percepción de que es un problema grave, pero realmente sólo lo es para una pequeña parte de la población y tampoco hay una certeza al cien por cien de que el virus del zika lo provoque. Me refiero a las mujeres embarazadas y los casos de microcefalia detectados en Brasil actualmente y hace un par de años en la Polinesia Francesa. Pero, insisto, ni el virus es una emergencia de salud pública ni es un problema grave para la población. Pero como toda enfermedad nueva que no tenemos, no nos interesa que llegue.

Hasta ahora se han constatado una veintena de casos de personas afectadas por el zika en España, uno de ellos en la Región de Murcia. Todos son importados, es decir, que estos ciudadanos se infectaron en otros países. ¿Qué tiempo le da usted para que se convierta en una enfermedad propia en España?

Creo que aún nos falta por tener más información para poder saber cómo se transmite el virus y su magnitud. Sabemos que lo pasa un mosquito del género aedes, el aegypti, y se cree que también el albopictus o tigre, que es el que tenemos aquí. Cuando tengamos más información podremos ser más eficaces en su control. Creo que puede convertirse en una enfermedad autóctona, aunque espero que no se produzca.

¿Y qué se puede hacer mientras para evitar que ocurra?

Nos tenemos que implicar toda la sociedad, no sólo los medios públicos, para reducir la población del vector o transmisor, es decir, del mosquito, y controlarlo. Hay que lograr un saneamiento ambiental tanto en los espacios públicos como en los privados. Si vivimos en un entorno sano y limpio se puede reducir en mucho el riesgo de que se convierta en una enfermedad autóctona. Y si no somos capaces de indentificar los casos importados, podemos tener el problema de la transmisión local del virus. En cualquier caso, se podrá controlar; no será de una magnitud elevada.

Los expertos informan de que sus síntomas son parecidos al de un resfriado.

El zika no es grave. Sólo se manifiesta clínicamente en uno de cada cinco casos. La mayoría ni siquiera presenta síntomas. Para la población en general es leve y sólo el grupo de las mujeres embarazadas, o que quieran estarlo, puede ser de riesgo.

¿Tiene el Ministerio un mapa actualizado de dónde hay poblaciones de mosquito tigre?

Tenemos confirmada su existencia en la costa mediterránea, desde Cataluña hasta Andalucía y en municipios de Aragón y el País Vasco también se le ha identificado. En el resto de España no, pero eso no significa que no exista, tal vez es que no se ha buscado, aunque hay un sistema de vigilancia que poco a poco va a abarcar el país entero. En cualquier caso, no tienen por qué evolucionar a una densidad grande.

¿Ha detectado el centro que usted dirige otros potenciales riesgos sanitarios por nuevos virus?

Todos los días revisamos nuestras fuentes de información para detectar señales de riesgo sanitario en el mundo que nos puedan afectar, valorando la posibilidad de que lleguen a España. Solemos abrir cada año 70 expedientes de riesgos sanitarios, con diferentes grados de seguimiento. Algunos los controlamos prácticamente todos los días. Por ejemplo, estamos pendientes de la evolución de los casos de chicunguña; del patógeno Mers Coronavirus, procedente de la penísula arábiga y Oriente Medio, y que provoca un síndrome respiratorio agudo, y que puede ser un riesgo en el futuro. También seguimos los nuevos tipos de gripe que se generan en el Sudeste Asiático y que son más graves de lo habitual, ya que pueden causar una nueva pandemia de gripe.