El conflicto entre médicos y enfermeros por el Real Decreto de Prescripciónconflicto entre médicos y enfermerosReal Decreto de Prescripción se ha recrudecido en los últimos días en la Región de Murcia tras las declaraciones del secretario general del sindicato Satse, José Antonio Blaya, asegurando que algunos profesionales estaban recibiendo amenazas de los facultativos "por querer cumplir la ley".
A Blaya le respondió, por requerimiento de este diario, la presidenta del Colegio de Médicos de Murcia, Isabel Montoya, quien rechazó de forma contundente que se estén produciendo las amenazas que denuncia el sindicato de enfermería y recordando que recientemente el Tribunal Supremo ha rechazado las medidas cautelares que pedían los enfermeros contra la aplicación del Real Decreto de Prescripción.
"Todo esto es una polémica ficticia que han creado tanto Satse como el Consejo de la Enfermería, y ahora encima toman el papel de mártires. El real decreto lo que hace es precisamente darle seguridad jurídica, pues el artículo 3.1 dice claramente que 'podrán indicar, usar y autorizar la dispensación de medicamentos sujetos a prescripción médica'. Otra cosa es que ellos quieran coger el bolígrafo para recetar directamente. Y el bolígrafo es el instrumento más peligroso en sanidad, más que el bisturí", señaló a esta Redacción la presidenta del Colegio de Médicos de Murcia, que recuerda que "si quieren ser médicos, las facultades de Medicina están abiertas".
Montoya apela a la responsabilidad de cada uno de los profesionales del sector sanitario, "que deben tener muy clara su función. Y la función de los médicos es el diagnóstico y la prescripción. Los enfermeros, las curas y la atención a los enfermos crónicos. Con el decreto, además, pueden recetar, siempre y cuando tengan la prescripción médica".
Reclama también la presidenta del Colegio de Médicos responsabilidad para que "esta polémica ficticia" no acabe perjudicando a los pacientes. "Nos han llegado casos de enfermeros que, desde la entrada en vigor del decreto están boicoteando los médicos, porque piden instrucción escrita para cualquier receta, incluso para Betadine", señala Isabel Montoya.
"Cuando el Supremo no suspende el real decreto, por algo será", recuerda la presidenta del Colegio de Médicos, quien alerta también de los peligros de avanzar "hacia un modelo de sanidad pública 'low cost', reduciendo el número de médicos".
"No queremos ningún boli"
Tampoco está de acuerdo con las declaraciones del responsable regional del sindicato Satse la presidenta del Colegio de Enfermería de la Región, Amelia Corominas. Según ella, el organismo colegial no ha recibido ni una sola denuncia de profesionales murcianos que aseguren que estén recibiendo amenazas por parte de los médicos, como decía Blaya.
Amelia Corominas se mostró preocupada ante la tensión creciente entre facultativos y enfermeros, temiendo que los que finalmente resulten afectados sean los usuarios. "Cada profesional sanitario tiene su ámbito de trabajo y hay que poner cordura. Los pacientes no pueden estar pagando el pato de este carrusel de dimes y diretes. No queremos conflictos profesionales. A los enfermeros les estamos recomendando que actúen siempre con prudencia, que hagan su trabajo y consulten sus dudas con el médico".
Informada sobre las declaraciones de la presidenta del Colegio de Médicos, Corominas indicó que los facultativos "no quieren coger ningún bolígrafo, sino tener el sustento legal para tomar las decisiones en nuestra área de actuación". También recuerda que el Tribunal Supremo, aunque ha rechazado la medida cautelar solicitada de suspender la aplicación del decreto, sí ha admitido los recursos que diferentes colegios de enfermeros, entre ellos el de Murcia, presentaron contra la nueva normativa. "No queremos una Sanidad 'low cost', sino de alta calidad", finalizó.
