Miguel Sánchez, portavoz de Ciudadanos en la Región, asistió ayer en Madrid a una reunión con el presidente del partido, Albert Rivera, el resto de representantes de la formación naranja en los diferentes parlamentos autonómicos y los responsables en las tres comisiones de investigación sobre corrupción abiertas en las comunidades de Madrid, Andalucía y Murcia.

Y la expedición regional ha sido protagonista, según fuentes del partido, que aseguran que las comisiones de investigación de la delegación autonómica de Ciudadanos en Murcia fueron puestas como ejemplo, tanto por su funcionamiento, como por el formato de las mismas.

Tras la reunión, en clave nacional, Rivera anunció que Ciudadanos realizará una acción conjunta en parlamentos y municipios, así como en el Congreso, para que haya un cambio fundamental en las comisiones de investigación. El objetivo de su partido, dijo Rivera, es reformar el reglamento de los parlamentos para que en España «no haya mayorías de bloqueo» y con un tercio de diputados de las cámaras se puedan poner en marcha comisiones de investigación. «Así nunca una mayoría parlamentaria podrá impedir que se investigue», destacó, antes de resaltar que el objetivo es que las comparecencias y las conclusiones de esas comisiones «tengan y reflejen esas minorías de un tercio» y que haya votos particulares que puedan ejercer dichas minorías.

En cuanto a la situación actual, Rivera destacó la labor llevada a cabo por su partido en las distintas comisiones de investigación que hay abiertas, en las que se han conseguido «dimisiones notorias».

En este sentido, la reunión tuvo lugar un día después de que el portavoz del PP regional, Javier Iniesta, anunciara que los alcaldes de Los Alcázares, Anastasio Bastida, y de Molina de Segura, Eduardo Contreras, tendrán que dejar su puesto solo si los jueces que los investigan actualmente concluyen que deben sentarse en el banquillo de los acusados. Desde Ciudadanos Región de Murcia aseguran que esta decisión no hace más que abundar en el incumplimiento del acuerdo de investidura de Pedro Antonio Sánchez: «El Partido Popular no es de fiar, y sigue empeñado en aislarse evitando regenerarse».