Los ganaderos murcianos están hartos. El precio de los productos lácteos «se hunde», los transportes son atacados en Francia y sus competidores galos gozan de mejores condiciones económicas. Por eso, la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos de España (UPA) debatirá el próximo jueves en una reunión interna si acuerdan iniciar una «campaña de boicot» contra los productos franceses.
«Analizaremos el transcurso de la semana para ver si tomamos esa decisión», ratificó a este diario el secretario regional de Ganadería de UPA, Carlos Esparcia. «Queremos esperar a la respuesta de los Gobiernos de Francia y de España ante la crisis», dijo, y añadió: «Y, sobre todo, estamos a expensas de si vuelve a producirse cualquier otro ataque a los caminones». Es decir: «Si empeora la situación, tal vez tomaremos la decisión de iniciar un boicot», avisó.
No ha gustado tampoco a los productores españoles los acuerdos fomentados por el ministerio de Agricultura francés para que la industria y la distribución gala suban el precio en 4 céntimos de la leche. «Nos dejan a años luz, porque estas empresas imponen en España un precio de 22 céntimo por litro, mientras en Francia se sitúa en 0,34 euros», añaden desde UPA en un comunicado.
«Los franceses consiguen negociar los costes, mientras nuestro mercado nacional tiende a la baja», agrega Esparcia. «Cualquier iniciativa para impulsar los precios se topa con la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), que la califica como 'anticompetitiva'», protestan.
Además, el representante de UPA asegura que estas variaciones de los precios repercuten en la Región de Murcia: «Afectan en tanto que la ganadería tiene un gran peso en nuestra comunidad».
«Es la paradoja de nuestro país: es deficitaria su producción de leche y sin embargo hay excedentes de productos procedentes de Europa», comentó Esparcia. «Nosotros pedimos lo mismo que los franceses: precios justos».
«No a las guerras comerciales»
El consejero de Desarrollo Económico, Turismo y Empleo, Juan Hernández, pidió ayer que «se normalice la situación» ante los agresiones a los camioneros y mostró su apoyo a los ganaderos, pero no cree que la mejor fórmula para solucionar esta crisis sea a través de un boicot. «Evidentemente, no lo apoyaría. No sería positivo para España ni para Francia que se puedan tomar este tipo de represalias que acaben en guerras comerciales».
Juan Hernández quiso mostrar su apoyo in situ a la empresa de transporte atacada en Poitiers. «Es deseables que las huelgas acaben lo antes posible, pero no lo sería poner en marcha una contramedida que puede agravar la situación», afirmó.
