El Libro Blanco de la Construcción recogerá nuevas propuestas que favorezcan el acceso a la vivienda en alquiler de los ciudadanos en general y, en especial, de los sectores más vulnerables y con escasos recursos económicos, «con una orientación clara dirigida a atender las actuales necesidades surgidas a raíz de los cambios económicos, sociales y demográficos».

Así lo dio a conocer este martes el consejero de Fomento e Infraestructuras, Francisco Bernabé, tras presidir la reunión del Grupo de Trabajo de Vivienda que participa en la elaboración del documento.

En este encuentro se analizaron más de 30 propuestas presentadas por los 20 colectivos que participan en este grupo de trabajo, con las que se pretende articular y definir el desarrollo de las políticas de vivienda en la Región en el horizonte 2015-2025.

Las políticas de alquiler se fomentarán especialmente en dos vertientes: por un lado, al promover incentivos para la puesta en alquiler de viviendas desocupadas; y, por otro lado, al fomentar la construcción de viviendas destinadas a este fin.

También se ha dado importancia a una iniciativa hasta ahora inexistente en la Región como es «la creación de un registro de profesionales expertos de la construcción en el ámbito de la vivienda, certificados y habilitados por la Administración», una de las novedades contenidas en la nueva Ley de Vivienda «a la que se ha decidido dar un impulso integrándola en el Libro Blanco para su posterior desarrollo reglamentario», explicó Bernabé.

La reunión también ha servido para fijar el índice en este campo del Libro Blanco de la Construcción, con siete apartados en total, y se designó también el equipo redactor que, como en el caso del resto de las mesas de trabajo, elaborará un primer borrador, sobre el que se podrán desarrollar las labores de análisis y redacción a partir del mes de septiembre, con el objetivo de que el documento definitivo pueda ser presentado a final de año.