Las asociaciones de pacientes y profesionales que conforman la llamada Marea Blanca en defensa de la sanidad pública en la Región de Murcia lograron este martes su objetivo de que la mayoría de partidos políticos que se presentan a las próximas elecciones firmen un pacto por el que se comprometen a garantizar un servicio de salud para la Región que sea público, universal, en el que predomine la equidad, que tenga una gestión transparente y que cuente con la opinión y participación de los ciudadanos a través de los consejos de salud. Partido Socialista, Izquierda Unida-Verdes, Upyd, Podemos, Equo, Alternativa Socialista, Recortes Cero y Ciudadanos de Centro Democrático rubricaron este Pacto por la Sanidad en un acto en el edificio Moneo de Murcia en el que declinaron estar Partido Popular, Ciudadanos y Vox.

Los firmantes se comprometieron a batallar por recuperar el terreno perdido con los ajustes presupuestarios en los últimos años. Garantizar la derogación de Real Decreto 16/2012 para que todos los inmigrantes y jóvenes mayores de 26 años sin contrato tengan derecho a todas las prestaciones, que haya mayor transparencia en la gestión de las listas de espera, que se garantice la operatividad a pleno rendimiento del hospital Santa María del Rosell de Cartagena y mejoras en las condiciones laborales de los profesionales son algunos de los compromisos. La reducción «al mínimo» de los conciertos con clínicas privadas también es otros de los objetivos que se incluyen en los diez puntos principales de este pacto que encierran más de cincuenta medidas concretas.

Para Rafael González Tovar, candidato del PSOE, aseguró tras la rúbrica que con este pacto tras el 24M se conseguirá «acabar con el deterioro y la discriminación que existe actualmente en la sanidad pública», Para José Antonio Pujante, candidato de IU, las medidas de participación ciudadana en los centros sanitarios y en el conjunto del sistema sanitario incluidas en el texto suponen «una recuperación de un espacio público, que el PP eliminó al disolver los consejos de zona». La despolitización de la sanidad pública a través del nombramiento de gestores con criterios objetivos y la creación de consejos de gobierno en los centros es la principal medida que defendió la coordinadora regional de UPyD, Fuensanta Máximo. Desde Podemos, su candidato a la presidencia, Óscar Urralburu, denunció «los recortes y pérdida de derechos» y celebró que el de ayer fuera «un día alegre para la Región de Murcia ya que los movimientos sociales han sabido reaccionar a los ataques que tendrán fin el 24 de mayo». En términos similares se expresaron los partidos Equo, Ciudadanos de Centro y Alternativa Socialista (Clias).

Antes de la intervención de los políticos hablaron los representantes de las asociaciones que durante meses han trabajado en la elaboración de la propuestas. La Asociación para la Defensa de la Sanidad Pública en la Región, Asociación de Usuarios, Plataforma Salvemos al Rosell, La Sociedad de Medicina Familiar y Comunitaria, el Colegio Oficial de Enfermería, Asociación Amiga y Delegación de Alumnos de la facultad de Medicina de la UMU componen esta Marea Blanca que este jueves saldrá en manifestación por las calles de Murcia para reivindicar sus posiciones antes del inicio de la campaña.

El portavoz del PP regional Víctor Martínez criticó en otro acto que se haya puesto «un nuevo cordón sanitario al PP» y aseguró que «estas mareas no escuchan a los ciudadanos», ya que los murcianos, afirmó, en un estudio reciente «valoraban con una nota de 7,5 la atención en centros de salud y de 8,5 en atención hospitalaria». El PP ha argumentado a la Marea Blanca que no firmará ningún texto ajeno a su programa electoral, mientras que Ciudadanos afirma que no hará pactos hasta pasado el 24 de mayo.