La Sala de lo Contencioso del Tribunal Superior de Justicia de la Región (TSJ) ha anulado la multa impuesta por la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) a un regante al que acusó de no respetar las restricciones acordadas en el consumo de agua.

En septiembre de 2010 el apelante fue sancionado con una multa de 600 euros y el pago de una indemnización cercana a los nueve mil euros por los daños causados al dominio público hidráulico por consumir más agua de la que le correspondía según las restricciones acordadas en junio de 2009. El TSJ alega que «existe una duda razonable sobre la culpabilidad» del regante puesto que la CHS no aportó documentación que justificara la infracción cometida.