El cruce de mensajes whatsapp entre un hombre y su esposa ha dejado en evidencia al primero, al acreditarse con los mismos que, en contra de lo que afirmó al reclamar la guarda y custodia de los hijos, estuvo informado en todo momento de la marcha de ella y de los menores de la vivienda familiar y de su nuevo domicilio.

Estas consideraciones se contienen en una sentencia de la Audiencia Provincial de Murcia que estima sólo en parte el recurso presentado por el demandante al fijar quién debe afrontar los gastos derivados del uso y conservación del piso familiar.

Indica la sentencia que el marido planteó una demanda de divorcio contra su esposa y solicitó que se le atribuyera la guarda y custodia de los hijos menores de edad, que se le concediera el uso de la vivienda y que se condenara a ella a devolver el mobiliario y ajuar doméstico que había retirado.

La sentencia concedió la custodia a la madre y, al padre, el uso de la vivienda familiar, resolución que fue apelada por éste ante la Audiencia Provincial de Murcia.

En su recurso, consideró que el juez no había valorado correctamente las pruebas aportadas al proceso, para añadir que la madre no era la más adecuada para encargarse de la guarda y custodia de los niños, además de exponer que se había marchado de la casa con ellos sin que él supiera dónde estaban.

Frente a esa argumentación, el tribunal comenta que el cruce de mensajes efectuado entre ellos ha permitido comprobar «que la marcha de la madre del domicilio con los hijos era conocida por el marido, así como su cambio a otro colegio y que se llevó con ella parte del mobiliario de la casa común». Señala igualmente la sala que «esos whatsapp desmontan la postura del apelante, con denuncias donde afirma, con manifiesta falta de respeto a la verdad, que la marcha de la madre ha sido sorpresiva y que no sabe dónde están la misma y sus hijos».