Que corra el aire
Alcayna-Altorreal lanza una campaña para proteger a los ciclistas
El club ha puesto en marcha una campaña para evitar los accidentes de tráfico en ciclistas
EFE
El Club Ciclista La Alcayna-Altorreal ha puesto en marcha una campaña de concienciación para evitar accidentes de tráfico en los que se vean afectados ciclistas y, bajo el título '¡Que corra el aire!', pretende que los conductores de vehículos motorizados respeten la distancia de seguridad con quienes circulan por la calzada en bicicleta.
Con esta campaña se recuerda, además, a Javier García Flores, conocido por sus amigos y compañeros con el sobrenombre de 'Altaria' y miembro del club molinense, quien falleció el 1 de mayo por la imprudencia de un conductor en el municipio de Archena.
Esta iniciativa tiene como fin "reactivar la movilización de todos los ciclistas y recordar al resto de usuarios de las carreteras la más simple de las normas de circulación que protege la vida de los ciclistas", detalla el club a través de un comunicado.
El símbolo de la campaña es una señal de tráfico triangular que avisa peligro, en la que se lee la frase 'Que corra el aire' y aparecen un coche una bici con la separación lateral que debe haber entre ambos, un metro y medio.
- Este bar de Murcia empezó sin mesas y ahora viene gente de toda España por sus míticos bocadillos: 'Muy buen precio
- La Región de Murcia amanece helada: termómetros bajo cero y un récord histórico en Caravaca
- Abren una lista extraordinaria en la Región para buscar docentes de cuatro especialidades
- A casi siete grados bajo cero: la Región de Murcia se congela y se prepara ante la llegada de la nieve
- No ha cumplido 2 años y esta cafetería de Murcia ya está junto a las 100 mejores del mundo: 'Es la mejor de España
- El convento junto al Santuario de la Fuensanta se convertirá en una hospedería regentada por monjas
- La ‘gripe de estómago’ coge fuerza en la Región y llena las consultas junto a los virus invernales
- El 'ejemplo' del obispo de Zamora, el murciano Fernando Valera: deja el Palacio Episcopal para vivir en un piso de 75 m²