­Pilar Barreiro considera que la transformación «radical» que ha experimentado Cartagena en las últimas tres décadas se ha visto favorecida por el marco autonómico, que ha dado al Ejecutivo regional la capacidad de actuar. «Esta ciudad posee, por ejemplo, una red de 37 consultorios y centros de salud que se han construido en los últimos 17 años gracias a que la Comunidad tiene competencias en materia de sanidad y un Gobierno que ha querido realizar esa auténtica revolución en materia de atención primaria», subraya la alcaldesa.

¿Cuál es su reflexión acerca del Día de la Región?

Creo que es una buena oportunidad para pensar sobre las ventajas de vivir en comunidad y de contar con un sistema que está cerca de la gente y sus problemas y, por tanto, tiene mayor capacidad para escuchar mejor y tomar decisiones más adecuadas a nuestras necesidades. Vivimos en una época difícil en la que es fácil cuestionarse muchas cosas, pero hay principios que son válidos en todo momento, y uno de ellos es la ventaja que tiene la proximidad a los problemas para la toma de decisiones.

¿Qué ha supuesto el Estatuto de Autonomía para la Región?

Bueno, es el documento que elaboró la sociedad murciana hace ya tres décadas para organizar nuestra convivencia y para poner en nuestras manos los instrumentos necesarios para que pudiéramos tomar decisiones sobre nuestro futuro y hacerlas realidad. En este tiempo, la Región ha crecido gracias a esas posibilidades. Hemos dedicado nuestros recursos a mejorar las comunicaciones entre nuestras ciudades, a mejorar en Sanidad y Educación, a atender con mayor eficacia nuestras necesidades sociales y, en definitiva, a crecer en prosperidad y en modernidad con medidas que hubiera sido difícil tomar desde centros de decisión que no estuvieran tan cerca de nuestra realidad. Pero vivimos tiempos difíciles y los ciudadanos están pendientes, más que nunca, de las instituciones. En las crisis las instituciones tienen que demostrar que son útiles, se pone a prueba su capacidad, y de lo que seamos capaces de hacer dependerá el crédito que les den los ciudadanos.

¿Y para los municipios?

Los municipios, los ayuntamientos, son parte esencial del modelo. La decisión de los municipios fue imprescindible hace treinta años para crearlo y el trabajo municipal sigue siendo imprescindible para que funcione. La Comunidad necesita a los ayuntamientos para poder desarrollar su trabajo y los ayuntamientos necesitamos del respaldo regional para hacer bien el nuestro. Los centros de salud y los institutos los puede construir la Comunidad porque los ayuntamientos ponemos el suelo y nosotros hacemos llegar a los ciudadanos las políticas sociales regionales. Pero, además, en las últimas décadas ha habido planes en materia de seguridad o de financiación que han supuesto una ayuda directa para que las corporaciones locales podamos atender mejor nuestras obligaciones.

¿En qué aspectos cree que debe incidir la reforma del Estatuto de Autonomía?

Éste es un trabajo que corresponde a la Asamblea, y me consta que la ponencia que se ha constituido para reformar el Estatuto ha avanzado mucho en su trabajo. Estamos viviendo momentos de profundas transformaciones, cambios que se están impulsando a gran velocidad desde el Gobierno para reformar y hacer más eficaces las estructuras españolas. Una de las reformas más importantes va a ser la de las administraciones públicas, un cambio que establecerá las competencias de cada administración y las dotará con recursos suficientes para desarrollarlas con garantías. Así reduciremos costes a los ciudadanos y evitaremos duplicidades porque habrá una Administración para cada competencia. Esas son las transformaciones inminentes más importantes y será necesario adaptar las relaciones entre las administraciones cuando queden establecidas.

¿De qué forma contribuye su municipio a impulsar ese proyecto común de región?

Practicando diariamente la colaboración entre instituciones. Los ayuntamientos también desarrollamos políticas regionales en muchos campos, desde los transportes hasta la depuración de aguas, contribuimos con nuestros recursos a desarrollar redes de salud o el mantenimiento del sistema educativo. Nuestra obligación es colaborar lealmente con esas políticas que responden a un diseño de Región del que se beneficia el conjunto de los ciudadanos.

¿Qué logros ha propiciado en Cartagena el Estatuto de Autonomía?

Cartagena ha cambiado radicalmente desde los tiempos preautonómicos y en gran parte de esas transformaciones ha sido determinante la existencia del marco autonómico que ha dado al Gobierno regional la capacidad de actuar. Cartagena, por ejemplo, tiene una Universidad porque hubo un Gobierno con voluntad de crearla y un estatuto que le daba atribuciones en materia universitaria. Nuestra ciudad tiene, por ejemplo, un teatro romano restaurado, porque el Gobierno regional puso a disposición de la ciudad los medios que le permitía el Estatuto en materia cultural. Por poner sólo otro ejemplo, Cartagena cuenta con una red de 37 consultorios y centros de salud que se han construido en los últimos 17 años gracias a que la Comunidad tiene competencias en materia de sanidad y un Gobierno que ha querido realizar esa auténtica revolución en materia de atención primaria y que, además, ha mejorado la atención especializada construyendo también un gran centro hospitalario como el de Santa Lucía. Esas son algunas de las grandes cosas que han transformado Cartagena y que habrían sido inviables en ese plazo de tiempo sin instituciones cercanas con capacidad para hacerlas.

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¿Existe en la Región un verdadero sentimiento de unión entre los municipios?

Creo que entre los pueblos y ciudades hay una relación más estrecha de lo que se percibe en la calle y se comprueba con facilidad en los momentos de necesidad. El terremoto de Lorca sacó a la luz ese sentimiento de proximidad. Todos reconocimos en Lorca a una ciudad hermana que necesitaba nuestra ayuda y la movilización fue total entre los habitantes de todos los municipios de la Región. Desde los ayuntamientos echamos una mano al de Lorca, con policías, bomberos y miembros de Protección Civil, pero también con técnicos de la construcción y otros operarios. Toda esa movilización fue prácticamente automática, no necesitó una convocatoria porque todo el mundo se puso en marcha para ayudarles. Creo que esa es la mejor cara de esa relación entre municipios, pero lo cierto es que esta relación es permanente a muchos niveles.

¿También entre los alcaldes?

Las personas que estamos al frente de los ayuntamientos tenemos, básicamente, los mismos problemas y las mismas necesidades, con independencia del tamaño de los municipios o del color político. Por eso existe un contacto permanente entre alcaldes y concejales de todos los municipios. En el día a día pedimos y ofrecemos ayuda a los compañeros que tienen esas responsabilidades. Trabajamos por los intereses comunes desde la Federación de Municipios, se toman acuerdos y se estudian estrategias comunes para todos pero, como le digo, nuestra cooperación es cotidiana y se produce a todos los niveles.