Desesperados por la creciente oleada de robos y las múltiples pérdidas que eso está generando al sector, muchos agricultores están buscando soluciones particulares para ´blindar´ sus cultivos, como la instalación de cámaras de seguridad en las fincas o la contratación de seguridad privada.

De hecho, el interés suscitado entre los propietarios de explotaciones agrarias en toda la Región ha hecho que la organización agraria Asaja firmara recientemente un convenio con la empresa Cuintec para que sus afiliados tengan más facilidades económicas a la hora de instalar el sistema. El sistema que instala esta empresa hace que las cámaras se activen con el movimiento y mandan un aviso al correo electrónico del agricultor para que éste pueda ver lo que sucede y, si están robando, pueda llamar a la Policía para sorprender a los ladrones en pleno delito. El presidente de Coag-Murcia, Pedro Lencina, también asegura que cada vez son más los agricultores que se interesan por estos sistemas, «aunque la falta de recursos por la crisis frena a muchos a la hora de decidirse por instalar cámaras en las plantaciones».