­La Policía todavía no ha conseguido desvelar de qué modo dos adolescentes de 16 años se hicieron con fotografías en las que aparecían al menos cuatro profesores del instituto de Cartagena donde cursaban sus estudios. Pero el hecho es que aparecieron colgadas después en la red social Tuenti, provocando un hervidero de comentarios insultantes hacia los docentes.

Estos dos adolescentes tendrán que responder ante un Juzgado de Menores del delito de revelación de secretos con difusión a terceros que le imputa la Fiscalía de Menores, quien pide que se le imponga a cada uno de ellos una medida consistente en cien horas de prestaciones en beneficio de la comunidad.

Según informaron a esta redacción fuentes cercanas al caso, a principios de marzo de este año, los acusados accedieron de alguna forma desconocida a las páginas personales que tenían varios de sus profesores en la red social Facebook, de acuerdo con el escrito de alegaciones de la Fiscalía. A dichas páginas sólo podían tener acceso las personas agregadas por los propios docentes como ´amigos´, lo que no era el caso de los dos alumnos.

Una vez con las imágenes en su poder, desde el ordenador de uno de los menores las subieron a la red Tuenti, utilizando para ello una identidad falsa bajo un ´nick´ que incluía la palabra ´playboy´. Las fotos fueron rápidamente objeto de los comentarios jocosos e insultantes de otros alumnos a los que los procesados tenían agregados. Se da el caso incluso de que en alguno de los comentarios les llegaban a advertir de los peligros que les podía suponer su actuación.

Las fuentes consultadas por esta redacción indicaron que las imágenes no eran en sí comprometedoras. Se trataba de fotografías de los docentes tomadas en su tiempo de ocio. Así, la celebración de una fiesta en la que aparecían varios de los docentes con alguna bebida servía a los alumnos para reírse de sus poses o gestos. Incluso se llegó a ´bromear´ con la orientación sexual de uno de los profesores por el hecho de aparecer con un bebé en sus brazos.

Estos hechos fueron descubiertos por los propios trabajadores del instituto, momento en el cual uno de los menores implicados procedió a borrar todas las fotografías desde uno de los ordenadores del propio centro educativo, según consta en las conclusiones provisionales de la Fiscalía.

Ninguno de los dos acusados cuenta con antecedentes delictivos y, de hecho, según los informes socioeducativos, ni presentan problemas de comportamiento ni sufren falta de integración en su entorno escolar.