El proceso de ingreso en las Universidades se ha complicado sobremanera desde que todos los estudiantes tienen la opción de inscribirse en cuantas universidades quieran para probar suerte y poder estudiar la carrera que desean. Esto ocurre tradicionalmente en titulaciones en las que es muy difícil obtener plaza y el mayor exponente es Medicina. El principal problema se da porque un mismo alumno puede ser admitido en varias universidades y, hasta que decide dónde se matricula las listas de varias universidades están abiertas. Por eso el rector de la Universidad de Murcia, José Antonio Cobacho, llevará a la Conferencia de Rectores la propuesta de crear una única lista nacional a la que se presenten todos los que quieran estudiar Medicina para que las plazas de toda España se repartan a nivel nacional siguiendo como criterio el expediente académico.

«Es algo muy difícil de hacer, pero tenemos que buscar una solución porque esto está afectando mucho a todos las universidades y a los propios alumnos que se pasan un mes pendientes de varias comunidades y acudiendo a actos de llamamiento para poder conseguir una plaza», explica Cobacho.

De hecho, de los doscientos admitidos en la Universidad de Murcia este año en las primeras listas de julio tan sólo se han quedado unos cuarenta; el resto son personas que estaban en listas de espera y que han ido cogiendo plaza en sucesivos cambios de lista y llamamientos.

Lo que más afecta a las universidades es que hasta que las listas Medicina no se cierran hay otras titulaciones que tampoco pueden hacerlo. «El que se inscribe en Medicina también lo hace en Odontología, Enfermería, Farmacia, Fisioterapia... y las listas de espera en estas titulaciones se mueven en función de Medicina», explica la vicerrectora de Estudios, Concepción Palacios.

Entre los problemas a resolver antes de poner en marcha este sistema está el hecho de cómo medir las preferencias territoriales de los alumnos para evitar que un murciano estudie en Galicia y un gallego lo haga en Murcia cuando ambos quisieran quedarse cerca de casa.