La Unidad Central de Delincuencia Económica y Fiscal investiga si el dueño del Hércules y uno de los principales implicados por el ´caso Brugal´, Enrique Ortiz, pudo manejar información privilegiada sobre contratos licitados por el ayuntamiento de Murcia, según se desprende de las conversaciones grabadas al citado empresario entre mayo y julio de 2008, en las que, bien él, bien algunos de sus interlocutores, aluden al alcalde de la ciudad, Miguel Ángel Cámara, al ex concejal Antonio Sánchez Carrillo, y el actual edil de Limpieza Viaria, José Ros, al que incluso Ortiz califica como «realmente el hombre de confianza de Miguel Ángel» En total, los agentes grabaron entre mayo y julio de 2008 hasta trece conversaciones telefónicas entre Ortiz y otros empresarios y socios del constructor alicantino referidas al concurso de la concesión de la Línea 1 del Tranvía de Murcia, cuyo pliego de condiciones fue aprobado por el ayuntamiento de Murcia el 30 de julio de 2008, y del que presumen disponían información previa a hacerse oficial. La empresa de Ortiz tenía la concesión de la Línea 0 del Tranvía, aunque, finalmente el ayuntamiento no le concedió la Línea 1, ya que la UTE formada entre FCC y Grupo Comsa ganó el concurso municipal. No obstante, la firma Civica (antes Ortiz e Hijos) y Acciona cobraron, tras perder el concurso, varios millones de euros de indemnización por haber construido la Línea 0.

La documentación que obra en poder de este periódico está formada por dieciséis folios, que a su vez forman parte de la investigación del ´caso Brugal´, redactados bajo el epígrafe «Región de Murcia. Tranvía de Murcia». En la investigación remitida al juzgado, los agentes afirman que «se detectan un total de trece conversaciones que configuran la base sobre la cuál se va a articular la trama». Y concluye el documento: «En el presente informe han sido expuestos de manera sistemática los aspectos más relevantes detectados a lo largo de la intervención telefónica practicada al teléfono utilizado por Enrique Ortiz Selfa para su efectiva consideración, por si de ellos pudiera desprenderse la comisión de algún ilícito penal».

La primera conversación, grabada el 13 de mayo de 2008, tuvo lugar entre Ortiz y, posiblemente, Juan José Fernández González, apoderado de Acciona Infraestructuras S.A., y en ésta el dueño del Hércules le dice al segundo: «Vale, voy a comer con el Alcalde (de Murcia), le diré algo. Ya te digo algo». Y continúa el informe policial: «Ambos continúan hablando de unas adjudicaciones y Juanjo le reprocha a Ortiz que nunca va con él a las licitaciones que finalmente le son adjudicadas, replicando éste que, respecto al tranvía, van a ir y se la van a dar».

En otra conversación grabada, esta vez el 16 de mayo de 2008, «Juanjo le dice (a Ortiz) que «el lunes voy a comer con uno para el tranvía en Murcia y Juan (Amirola, también está ahí moviéndose. Eso va a salir ya. A ver si nos pagan el resarcimiento».

En la undécima conversación, del 29 de julio de 2009, víspera de la aprobación municipal del pliego de condiciones, Ortiz asegura que «tenemos garantías de que nos lo van a dar y yo he adquirido un compromiso de que Tranvimur firme un convenio para llevar la marca de Tranvimur el equipo de baloncesto de allí, de la ciudad. Le he dicho al alcalde que sí. El alcalde me dijo, oye, mira, necesitaríamos que nos echárais una mano en este tema, con el sponsor de esto tal (sic). Bueno, si nos adjudican, el tema es firmar un convenio durante todo el año de un millón de euros. O sea, que tenemos que cargárselo a la oferta, claro». El equipo de baloncesto de Murcia llevó la publicidad de Tranvimur durante la temporada 2008-2009, aunque finalmente no llegó a cobrar el millón de euros acordado.

Asimismo, Ortiz, siempre según la documentación policial, dice textualmente: «Dárnoslo, es muy difícil que nos lo quitasen. Vamos, nos lo van a dar. Pero a mí lo que me preocupa es que nos apretemos mucho y que no lo hagamos rentable como debemos hacerlo. ¿Sabes lo que te quiero decir?». Juanjo comenta que «ya, eso, eso es un trabajo nuestro», tanto hacerlo rentable en obra como en explotación. Poco después añade «es que no estamos manejando el pliego (de condiciones) como deberíamos. Me está diciendo Santiago que es que van a arrimar mucho el precio y eso es lo que no podemos consentir», proponiendo Juan que «luego hay puntos para recuperar». Ortiz le pregunta si tiene una «avanzadilla del pliego», respondiendo su interlocutor que algo tienen. (...) manifestando Ortiz: «Vale, la información que no tenga, decírmelo. Le voy a decir ahora que me lo digan para que cojamos y yo, vía alcalde, que hay buena relación, que me lo dé».