El ministerio del Interior destinará a partir del próximo 1 de julio cerca de 4.000 agentes de la Policía Nacional y la Guardia Civil a la denominada Operación Verano para reforzar la seguridad en las zonas de mayor afluencia turística hasta finales de septiembre.

La operación se desarrolla durante todas las épocas estivales y este año aumentará en un 30% el número de agentes que reforzarán las plantillas emplazadas de forma permanente en las diferentes comunidades autónomas. Entre ellas, policías y guardias civiles trabajarán en Murcia, Andalucía, Asturias, Canarias, Cantabria, Comunidad Valenciana, Galicia, Islas Baleares, Madrid y en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla. Igualmente, se incrementará la presencia policial en la ciudades históricas Patrimonio de la Humanidad de Ávila, Cáceres, Cuenca, Mérida, Salamanca, Segovia y Toledo hasta el próximo 30 de septiembre.

Para impedir la comisión de posibles atentados terroristas, se adoptarán planes operativos para neutralizar estas amenazas. La instrucción, que no modifica la alerta prevista en el Plan de Prevención y Actuación Antiterrorista, prevé la actuación de unidades específicas, como los Tedax o los guías caninos, en el caso de que se produzcan incidentes con explosivos. Los operativos terrestres contarán con el apoyo de helicópteros, tanto del Cuerpo Nacional de Policía como de la Guardia Civil. Según informó el Ministerio, el operativo se pondrá en marcha la próxima semana.