CCOO y UGT en la Región han convocado una manifestación para el próximo miércoles, día 30, por la tarde, en protesta por la reforma laboral aprobada por el Gobierno, y que será una cita previa a la huelga general, prevista para el 29 de septiembre.

Así lo anunció hoy, en rueda de prensa, el secretario regional de CCOO, Daniel Bueno, quien precisó que se están ultimando los detalles de la misma, que se sucederá igualmente en el resto de capitales de provincias con el objetivo, dijo, de "intentar limitar o hacer retroceder la reforma que el Gobierno aprobó".

En los mismos términos de expresó el secretario de Acción Sindical de la Confederal de CCOO, Ramón Górriz, quien aseguró que el sindicato "es consciente de que la huelga general la vamos a ganar, ya que no ha habido ninguna que no se haya ganado".

No obstante, reconoció que teniendo en cuenta la etapa actual de "largo aliento", la huelga "ni es el punto de llegada ni el punto final".

Desde CCOO Murcia, Bueno consideró que dicha reforma "representa una opción por parte del Gobierno, ya que había propuestas encima de la mesa en todo el proceso de diálogo con la patronal y el Ejecutivo, formulada con los sindicatos, que orientaba una reforma distinta pero el Estado ha cedido voluntariamente a los que dicen que despedir es una buena estrategia para generar empleo, aunque se sepa que todo ello es mentira".

Recordó, al respecto, que cuando se presentó el plan de austeridad del Gobierno central que suponía un recorte salarial a los empleados públicos del país, con la consiguiente congelación de las pensiones, lo que se hizo fue "poner una bomba de relojería al proceso de diálogo en todo el proceso de reforma del mercado de trabajo".

Se trata, reprobó, de una reforma del mercado de trabajo "negativa" tanto en el ámbito regional como nacional, "que no sólo no reduce la temporalidad, sino que abre nuevos espacios, por ejemplo el trabajo de las ETTs, además de que consagra las fórmulas actuales de trabajo temporal y nos condenará a seguir sufriendo esa dualidad".

"Una reforma, prosiguió, cuyo elemento más llamativo es la generalización de la subvención al despido, aunque este despido sea injustificado por parte del empresario y no tenga causa económica ni técnica para llevarlo a cabo".

Además, advirtió, "esta reforma da más poder a los empresarios en la determinación de las condiciones de trabajo de las empresas, y pone en serio riesgo la negociación colectiva para fijar las condiciones de trabajo, permitiendo que la decisión del empresario valga mucho más que la capacidad de negociación de llegar a acuerdos en el marco de empresas o sector".

"LA REFORMA SANTIFICA EL OBRERO BARATO"

Por su parte, Górriz también se refirió a esta reforma, que "facilitará y abaratará el despido", y advirtió que "si no fluye el crédito a pymes y familias, y no se reforma el sistema financiero se podrán hacer piruetas pero no se generará empleo".

Hasta el punto, incidió, de que "en 2015 valdrá casi lo mismo despedir a un trabajador fijo que temporal", ya que "lo que se apuesta es por convertir el contrato ordinario con 45 días de indemnización en un contrato residual".

Bastará, por tanto, "con que una empresa piense que puede tener menos beneficios y organizar de otra manera para que el empresario pueda despedir a los trabajadores".

De ahí, subrayó, "que el paro se convertirá en una fuente de negocio", tras lo que volvió a insistir en que con esta reforma "no se creará empleo, aumentará el paro, no se reducirá la dualidad en el mercado de trabajo y apostará por el obrero barato, que es lo que santifica esta reforma".

De este modo, subrayó que "si se compara el texto del Gobierno del 12 de abril en la mesa de negociación con el documento que se nos dio el viernes a los sindicatos, y el de ese mismo día con el Decreto Ley se verá como hay cosas que nunca han estado en la negociación y otras que han aparecido nuevas".

Razón por la que puso de manifiesto que "el documento del día 16 se parece como un huevo a una castaña respecto al del día 11 que se nos entregó a los sindicatos y todavía más alejado del documento presentado por el Gobierno el 12 de abril en la mesa de negociación".

Y es que, opinó, "en este proceso de negociación que se inició el 12 de febrero el Gobierno ha estado casi fuera de la mesa, en una situación más de espectador que de catalizador de una negociación, jugando el papel que le corresponde".

Asimismo, destacó que el Decreto Ley convalidado ayer en el Parlamento, "nos aleja del cambio de patrón de crecimiento de este país", ya que, explicó, "la competitividad de nuestra economía no se puede buscar en una competitividad basada en la reducción de los costes del factor trabajo".

Sobre la votación del decreto, de cuyo trámite se abstuvo el diputado del PSOE y ex secretario general de Comisiones Obreras, Antonio Gutiérrez, felicitó la actuación de esta persona por "la convicción y coherencia con las cuestiones que siempre defendió sobre estos temas".

En esta misma línea, Górriz argumentó que "si en este país no hay un cambio del modelo productivo, si no se edifica un tejido productivo basado en la investigación, la innovación y el desarrollo, siempre en los ciclos bajos de la crisis económica se tendrá este problema".