El Partido Popular de la Región de Murcia seguiría incrementando su distancia respecto al PSOE, cayendo éste casi ocho puntos, y ganaría escaños logrando la mayoría absoluta en caso de que mañana se celebrasen elecciones autonómicas en esta Comunidad.

Así se desprende del 'Barómetro de Primavera de la Región de Murcia', realizado por el Centro de Estudios Murcianos de Opinión Pública (CEMOP) y que hoy presentaron, en rueda de prensa, sus directores, Ismael Crespo, Juan José García Escribano y Antonia Martínez.

El objetivo de este estudio, realizado con la colaboración de la Universidad de Murcia, es retratar la realidad social y política de la Región en la primavera de 2010, para lo que se han realizado entrevistas telefónicas a 603 personas mayores de 18 años.

A su vez, se divide en tres áreas temáticas referentes a la situación socioeconómica, el funcionamiento de las instituciones y las actitudes políticas.

Así, en el caso de las actitudes políticas, la estimación de voto en las elecciones autonómicas "se mantiene en las mismas coordenadas, habiendo una enorme estabilidad en cuanto a las mediciones de los barómetros de otoño y abril", subrayó Crespo.

La fotografía que se extrae de este estudio es que si hubiera elecciones autonómicas, el PP las ganaría e incrementaría su nivel de escaños con respecto a 2007, una tendencia de la que Crespo ya advirtió que "no es nueva, sino que se vio a partir del barómetro de primavera y de las elecciones europeas".

En concreto, el PP incrementaría el voto en casi tres décimas, pasando de un 59,1 por ciento en las elecciones de 2007 a un 61,7 en caso de que se celebraran. Por el contrario, el PSOE lograría un "peor resultado" que en las elecciones de 2007, al caer en casi ocho puntos (32,4 por ciento en 2007 a 24,5 de estimación de voto).

Sin embargo, IU elevaría su umbral de voto respecto a 2007, pasando de 6,3 por ciento a 7,7; y UPyD obtendría un exiguo 4 por ciento, cuando en 2007 no estaba presente, por lo que "no hay valores suficientes para su entrada en la Asamblea Regional", indicó Crespo.

Sobre la caída experimentada por el PSOE, argumentó que "ha llovido mucho en términos mediáticos y le afecta en clave nacional, ya que el presidente José Luis Rodríguez Zapatero es el que más desciende y en la Asamblea Regional, también lo hace el PSOE".

"Es un partido que no se valora bien en la opinión público, además de que se han producido las trasferencias internas de voto muy intensas", alertó Crespo, quien consideró que todo ello "es un proceso de desgaste del Gobierno de la nación que afecta a los intereses del partido en Murcia, como también en otras CCAA".

AUMENTA LA PERCEPCIÓN NEGATIVA DE SITUACIÓN ECONÓMICA

En el caso de la percepción de la situación política, los niveles se mantienen "bastantes estables" con respecto al barómetro de otoño, según comentó García Escribano, quien subrayó que, en líneas generales, "el panorama se presenta bastante similar".

La nota diferenciadora la pone el hecho de que se observa un "incremento de la percepción negativa de la situación económica entre los murcianos, aunque son más optimistas que el conjunto de los españoles". Mientras que el diferencial es positivo para Murcia en 2,4 puntos, lo es negativo para España en más de 56 puntos porcentuales.

En concreto, según el barómetro, casi tres de cada diez murcianos consideran como "buena" o "muy buena" la situación política de la Región, siendo los hombres y los ubicados desde el Centro a la Derecha los que mejor la valoran.

Igualmente, sobre la situación económica se observa que durante el último año apenas han habido variaciones en las percepciones, de forma que uno de cada dos murcianos la valora como "mala" o "muy mala", frente a uno de cada diez que la percibe como "buena" o "muy buena" y dos de cada cinco que opinan que es "regular".

Si los datos de Murcia se compraran con los del conjunto de España, la percepción de los españoles es "mucho peor" que la que tienen los murcianos de su región, calificándola el 77 por ciento como "mala" o "muy mala" frente al 51 por ciento de los murcianos.

Asimismo, para más de la mitad de los entrevistados (58 por ciento), el principal problema de la Región sigue siendo el empleo seguido, aunque a mucha distancia, del agua (15,6 por ciento) y de la actual crisis económica (5,5 por ciento). La corrupción ocupa el cuarto lugar, con un 2,5 por ciento.

La nota significativa es el agua, que ha pasado a ser considerado otra vez como el segundo problema de Murcia debido a que en los momentos en que se realizó este estudio, que se enmarca en el proyecto 'Efectos de las campañas electorales municipales, a autonómicas y generales en la decisión del voto en Murcia', financiado por la Fundación Séneca, se estaba tramitando el Estatuto de Castilla-La Mancha y estaba en pleno "auge" el trasvase Tajo-Segura.

CRÍTICA HACIA LA LABOR DEL PSOE

En el apartado del funcionamiento de las instituciones, el estudio pone de manifiesto que el 36 por ciento de los entrevistados tiene una valoración "buena" o "muy buena" de la gestión del Gobierno regional, frente al 21 por ciento que la valora como "mala" o "muy mala".

Si estos datos se comparan con los anteriores barómetros de marzo de 2008, y abril y noviembre del pasado año, pues destaca "una estabilidad casi absoluta" en esta percepción, según García Escribano, quien explicó que ello muestra "la gran estabilidad de la opinión pública de la Región en referencia a la valoración del Ejecutivo murciano".

Por contra, uno de cada dos encuestados valoran negativamente la tarea de oposición del PSOE y menos de uno de cada diez la ve "positiva". Lo destacable es que la crítica hacia la labor de este partido alcanza en este barómetro su cifra más alta si se comparan con los datos de marzo de 2008, con un diferencial negativo de 51 puntos, frente al 33,7 que obtuvo hace dos años.

Estos valores repercuten a los líderes y afectan a su trabajo, de forma que Ramón Luis Valcárcel ganaría una décima con respecto a su calificación de noviembre del pasado año (5,9), manteniendo la de sus votantes (7,3); seguido de José Antonio Pujante (IU), con un 4,7 (4,5 en noviembre de 2009); y Pedro Saura (PSRM-PSOE), que se mantendría con un nivel medio de 4.

Los líderes nacionales suspenden en valoración, perdiendo Mariano Rajoy tres décimas (4,6) y ocho entre sus propios votantes; y Zapatero bajaría otras dos décimas (3,5) y dos más entre sus votantes, consolidándose como "el líder peor valorado en la Región".