La música y la danza de la Región viven un momento dulce. Ajenos al parecer a crisis económicas, los nombres de los artistas murcianos no dejan de sonar en los rincones más distantes del mundo. Así, primeras figuras del panorama internacional tienen acento murciano, como el compositor jumillanos Roque Baños, ganador de tres premios Goya entre otros galardones; el cartagenero José Carlos Martínez, bailarín estrella de la ópera de París; o el violinista Miguel Pérez-Espejo, nombrado artista extraordinario en Estados Unidos el pasado año. A ellos les sigue una pléyade de jóvenes promesas que demuestran su talento en Alemania, Austria, Luxemburgo, Qatar, México o China.

"Todos los profesionales que vienen a Murcia coinciden en que aquí hay mucha cantera -explica Teresa Souan, directora del Conservatorio Profesional de Danza-; la materia prima es muy buena y cada día se recogen más frutos".

El esfuerzo de los artistas por abrirse paso puede más que las dificultades que trae consigo la crisis, como indica Virgina Martínez, la directora de la Orquesta de Jóvenes de la Región de Murcia, para quien lo conseguido es "producto de la ilusión de los jóvenes. Aunque es importante el apoyo institucional, los logros llegan ante todo del esfuerzo individual".