Para llevar a cabo esta investigación, sus responsables han realizado un ensayo clínico con la colaboración del hospital Reina Sofía con 63 pacientes que tenían cáncer de próstata o hiperplasia benigna de próstata. En este estudio se dividió a los enfermos en tres grupos y a uno se le dio zumo de granada, a otro zumo de granada y nueces y al tercero nada. Tras analizar la próstata descubrieron que las 'urolitinas' eran capaces de llegar a ella, desarrollando su actividad antiinflamatoria y anticancerígena. Así, el doctor Juan Carlos Espín dijo que también retarda la posibilidad de que se produzca una recaída cuando ya se ha pasado el cáncer. Espín explicó que "donde más se ha investigado es en próstata, pero también en el cáncer de colon tiene efectos beneficiosos, por lo que en breve comenzaremos otro ensayo en el Reina Sofía con pacientes con colon irritable y voluntarios sanos para ver la evolución".