El restaurante La Cabaña de la Finca Buenavista recibió anoche su primera estrella Michelín. El logro es único. Único porque consagra a su cocinero, Pablo González Conejero, a la cima de la cocina murciana (sólo disfrutó de este premio el restaurante El Churrasco hace más de 20 años) después de seis años de lucha solitaria contra los prejuicios locales a esos platos con poca cantidad y aspecto hedonista. Y único porque sitúa por fin a la gastronomía regional en el universo gourmet.
Además es bueno, muy bueno, para la cantera de jóvenes cocineros que, como Pablo, saben aprovechar las virtudes del género local con la ambición del cocinero estudioso, alejado del prágmatico, que ha comprendido que comer ya es algo más que comer. Cuando Pablo recibió anoche la noticia, se supo en la cena del XX anviversario de la Guía Michelín en España, apenas podía articular palabra. Ni siquiera gritar. "No quiero despertar a las crías". Hoy la cocina murciana está de enhorabuena. Y Pablo y su equipo (Sergio, Miguel, Jesús, María, Fernando...) deben estar en el cielo. Por cierto, nada cambia. Quien se atreva, puede ir hoy mismo a comer o cenar. Comer o cenar "en el reino de la ilusión", como diría Pablo.
El cocinero murciano Pablo González-Conejero, del restaurante La Cabaña de la Finca Buenavista, en El Palmar, ha obtenido una estrella de la Guía Michelín España y Portugal 2010, presentada anoche en el mercado de San Miguel de Madrid. En la gala se dio a conocer la tercera estrella para el cocinero catalán Joan Roca, del restaurante El Celler de Can Roca (Gerona).
Roca es así el séptimo "tres estrellas" que hay actualmente en España. Los otros seis son, por orden de adjudicación, Juan Mari Arzak, restaurante Arzak (San Sebastián), Santi Santamaría, restaurante Can Fabes (San Celoni), Ferrán Adriá, restaurante El Bulli (Rosas), Martín Berasategui, restaurante Martín Berasategui (Lasarte), Carme Ruscalleda (Sant Pau) y Pedro Subijana (San Sebastián).
Suben a dos estrellas los restaurantes Casa Marcial de Arriondas (Asturias), Lasarte de Barcelona, La terraza del Casino (Madrid), y Les Cols (Olot). Pierde su segunda estrella el restaurante Tristán, de Portals Nous (Mallorca).
Obtienen su primera estrella los restaurantes El Etxebarri Axpe (Vizcaya), la Enoteca del Hotel Arts de Barcelona, A Estación de Cambre (A Coruña), M.B. de Guía de Isora (Tenerife), Bo,Tic, de Corça (Gerona), Julio Fontanar dels Alforíns (Valencia), La Fonda Xesc Gombrèn (Gerona), Cocinandos de León, La Broche, (Madrid), Diverxo (Madrid), Kabuki Wellington (Madrid), Ramón Freixa (Madrid), As Garzas, de Malpica (A Coruña), La Cabaña de la Finca Buenavista (Murcia), Alejandro de Roquetas del Mar (Almería) y el Torreó de L'India de Xerta (Tarragona).
Pierden la estrella los restaurantes Kursaal de San Sebastián, El Gallery Arts & Food de Gijón, Lillas Pastia de Huesca, el Chaflán de Madrid, el Solar de Puebla de Santa Cruz De Bezana (Cantabria), Read's, de Santa María del Camí, (Mallorca), la Taberna de Rotilio de Sanxenxo (Pontevedra) y Alejandro del Toro (Valencia).
Roca fundó en 1986 El Celler de Can Roca junto a sus hermanos Jordi, repostero, y Josep, sumiller y encargado de sala. Los tres pertenecen a la tercera generación de una familia dedicada a la restauración. En el año 2001 El Celler de Can Roca obtuvo "dos estrellas" Michelín.
La guía Michelín fue creada en 1900 por el industrial francés André Michelin como guía publicitaria. Los restaurantes no empezaron a aparecer en sus páginas hasta veinte años después. Fue en 1926 cuando apareció la primera "estrella Michelín" para designar la excelencia de los restaurantes. En la actualidad hay ediciones para España/Portugal, Italia, Austria, Bélgica, Alemania y otras ciudades europeas, así como en Nueva York, San Francisco y Los Ángeles/Las Vegas (EEUU). En la última versión se incorporaron las asiáticas Hong Kong/Macao y Tokio, la ciudad con más "tres estrellas" Michelín del mundo, once en total.
