El espíritu emprendedor se hace. Sólo hay que encontrarlo y potenciarlo. Con esta intención las consejerías de Educación y Empresa han puesto en marcha el proyecto 'Empresa joven europea' que permitirá a estudiantes de 13, 14 y 15 años crear sus propias cooperativas, lanzarse a la captura de clientes e incluso exportar sus productos a otros países de la Unión Europea. Esta iniciativa singular permitirá a 850 alumnos de 3º y 4º de Educación Secundaria Obligatoria (ESO) de de 28 IES de la Región vivir paso a paso cómo funciona el mundo de los negocios desde la creación de las empresas hasta su disolución, cuenta con el reconocimiento de la UE, que en su informe BEST incluyó este proyecto de Miniempresas en Secundaria como uno de los doce ejemplos de buenas prácticas en el fomento de la cultura emprendedora en institutos.

Como asignatura optativa

Dentro de las asignaturas optativas de iniciación profesional de la administración o del comercio, los alumnos serán los responsables de la redacción de los estatutos, la elección del producto, la marca, el precio, los proveedores, la financiación, los canales de distribución y transporte, las estrategias de compraventa, el plan de viabilidad, la adaptación para lograr un sello de calidad, el reparto de beneficios -una parte deberá ir destinada a proyectos sociales o medioambientales- y la extinción de la actividad de la nueva cooperativa.

Para dar un aire más realista a la experiencia, los miembros de todas estas empresas tendrán que montar en mayo, coincidiendo con el Día del Emprendedor, un stand en el que podrán vender sus productos de forma real.

Con esta iniciativa, según las consejerías de Educación y Empresa se pretende desarrollar, desde una perspectiva eminentemente práctica, la autonomía personal, las competencias social, lingüística y matemática, la estrategia para la asunción de riesgos, las dotes para el trabajo en equipo y el liderazgo, la responsabilidad y las habilidades para la negociación con clientes, bancos y proveedores.

Entre los objetivos de este programa destaca la realización de estudios de mercado antes de crear la empresa cooperativa, y una vez constituida empezar a funcionar como si estuviera en un mercado real. "Es una forma de aprender a emprender", defendieron los consejeros Constantino Sotoca y Salvador Marín en la presentación.