Estupefacto. Así es como se quedó Juan Solano, dueño de un comercio de venta de frutos secos y caramelos de Murcia, cuando descubrió que la Tesorería General de la Seguridad Social le había cobrado en su recibo mensual del RETA -Régimen Especial de Trabajadores Autónomos- una cotización adicional de 1,32 euros por "Riesgo de embarazo y lactancia natural".

Solano afirma, en un tono en el que se aprecia una mezcla de humor e indignación, que "si yo fuera una mujer no me habría sorprendido, pero cómo pueden confundirme después de tantos años cotizando cuando soy un hombre y, encima, de 63 años". Y, entre risas, añade, "como si me encontrara en edad fértil".

Pero, además, este comerciante del centro de la ciudad, ha pagado esta cotización adicional por "Riesgo de embarazo y lactancia natural" durante los meses de enero y febrero, ya que al ser el comienzo del nuevo año "los recibos de estos meses se pagan a la vez", explica, "y hasta que mi mujer no se acercó a la Tesorería a pagarlos no nos dimos cuenta". Juan Solano se muestra contrario a domiciliar estos cobros, ya que, según explica, "al ir directamente al banco no sabes ni lo que has pagado y cuando te das cuenta ya es demasiado tarde y tienes que comenzar con las devoluciones".

Este tendero dice que se percató de este nuevo cobro porque siempre ha tenido la misma cuota fija en los recibos desde hace nueve años, y por eso se molestó en buscar cuál era el motivo por el que había cambiado el importe.

Ante esta "injusticia", como él mismo la califica, ha presentado una reclamación por el cobro de contingencias indebidas que entró en el registro de la Tesorería General de la Seguridad Social el pasado 27 de febrero. Aunque señala que "aún no he recibido respuesta por parte de ellos, así, que si a final de este mes no se nada volveré a ir para que me informen".

Juan Solano está cotizando desde hace 39 años, "mi primer recibo fue en enero de 1970 y nunca he tenido ningún problema, pero también hay que decir que hay que llevar cuidado y estar muy pendiente, porque si no te cobran lo que quieren". Lleva toda su vida dedicado a los frutos secos, como él mismo explica. "Comencé con mi padre en la calle San Antonio de Murcia cuando tenía 13 años. Siempre me he dedicado a esto y lo seguiré haciendo en los dos años que me quedan para jubilarme", indicó.