López indicó que el hecho de que en Francia se prohíba el cultivo del maíz modificado "Mon 810" por las posibles repercusiones sobre la salud y el medio ambiente, "debería de ser motivo más que suficiente para que el Gobierno español tomara las medidas necesarias para prohibir su cultivo y el de todos los organismos genéticamente modificados, basándose en el principio de precaución".

Recordó que en el año 1988 la Unión Europea aprobó el cultivo de este maíz y que Francia lo ha prohibido "aplicando la cláusula de salvaguardia", por la que advirtió que "cualquier país puede oponerse si dispone de nueva información de que un cultivo transgénico constituye un riesgo para la salud humana o el medio ambiente".

COAG Murcia pide por ello que se escuchen los argumentos de los investigadores sobre las aplicaciones de la biotecnología en la modificación genética de plantas, "ante la amenaza que representa para la agricultura y el medio ambiente".