Cinco náufragos de nacionalidades belga y holandesa fueron rescatados el pasado lunes de madrugada por efectivos de Salvamento Marítimo a cuarenta y siete millas de la costa cartagenera y a dos millas de donde fueron interceptadas varias pateras, cuando se lanzaron al agua para bañarse con delfines, según afirmaron los cinco hombres cuando fueron llevados a tierra.

Las dos zodiacs en las que navegaban los náufragos se estropearon a primeras horas de la madrugada, según la versión de los náufragos. Las lanchas neumáticas, de once y cinco metros de eslora, pudieron estropearse mientras el grupo nadaba en el agua al paso de los cetáceos.

El rescate se llevó a cabo con la lancha de Salvamento Marítimo que los trasladó al puerto de Santa Lucía, donde se les aplicó el tratamiento que las leyes internacionales contemplan con los náufragos.

El procedimiento es sencillo y consiste simplemente en proporcionar a los náufragos lo necesario para contactar con sus países de origen. Los cinco belgas y holandeses fueron detenidos por actividad ilegal y posteriormente trasladados a dependencias judiciales, mientras se esclarece esta situación. Fuentes de la Guardia Civil y la Policía Local evitaron pronunciarse sobre el asunto.

El baño con delfines en alta mar es una actividad prohibida ya que entraña un considerable riesgo para quienes la practican. Aún de esta forma se tiene conocimiento de equipos 'piratas' que se arriesgan para tener esta experiencia.

La actividad sólo se puede llevar a cabo en lugares cerrados como delfinarios o centros oceanográficos, pagando precios elevados y bajo el control de monitores expertos.