El PSOE tiene previsto enviar la semana próxima al Tribunal Superior de Justicia de la Región de Murcia (TSJ) todo el proceso de recalificación urbanística de parte de la finca de Lo Poyo, en Cartagena, donde se pretende construir la macrourbanización Novo Carthago. Así lo anunció ayer la portavoz del grupo parlamentario socialista, Teresa Rosique, durante la comparecencia del presidente del Gobierno regional, Ramón Luis Valcárcel, en la Asamblea.

Rosique, que preguntó al presidente por el cambio de la estructura de la comisión técnica de impacto ambiental a finales de 2004 en plena tramitación del proceso de recalificación de Novo Carthago, habló de una reunión en San Esteban entre miembros de aquella comisión, el abogado de Hansa Urbana -promotora de la urbanización- y altos cargos de las consejerías de Medio Ambiente y de Obras Públicas. "En una sala próxima se encontraban Antonio Sánchez Carrillo -concejal de Fomento de Murcia- y el presidente Valcárcel". Según Rosique, en estas reuniones no se consiguió convencer a los técnicos de la comisión, por lo que dos meses más tarde se cambió la composición de la misma, "dejando sólo en ella a los jefes de servicio, pasando de nueve a cinco miembros y cesando más tarde al presidente de la misma", dijo Rosique. "En enero de 2005 esta misma comisión es la que aprueba la declaración de impacto ambiental de Novo Carthago", afirmó la portavoz.

El presidente Valcárcel no sólo negó la existencia de tales reuniones, sino que acusó a los socialistas de hacer "un cortijo" de la Justicia y de considerarla "un juguetito" y aseguró que nunca "encontrarán pruebas porque no hay nada de lo que dicen".

Valcárcel afirmó que el cambio de estructura de la comisión de pacto ambiental se debe precisamente al cambio en la estructura del área de Industria y Medio Ambiente "y no sólo la hemos cambiado en 2004, sino también en 2002", aseguró el presidente. El jefe del Ejecutivo, que recordó que mantiene "miles de reuniones con personas con proyectos para la Región de Murcia, faltaría más", también acusó a Rosique de tener "una rara obsesión" con el Palacio de San Esteban.

El proyecto de Novo Carthago junto al Mar Menor supone la construcción de unas 6.600 viviendas, así como instalaciones deportivas -campos de golf- y hoteleras. Su ubicación coincide con la de San Ginés de la Jara, zona protegida ambiental y culturalmente.