La compañía Spanair, propietaria del avión MD-83 en el que viajaban 146 personas más la tripulación desde Alicante hasta Palma de Mallorca y que realizó un aterrizaje de emergencia, reiteró ayer que en ningún momento hubo peligro para los pasajeros.
La hipótesis de trabajo de la compañía aérea sobre el incidente que obligó al piloto a realizar un aterrizaje de emergencia es que un pájaro chocó contra el motor izquierdo de la aeronave provocando la rotura de un bombín de la turbina trasera del motor. Este incidente provocó una importante caída de potencia y el piloto desconectó el motor afectado y volvió al aeropuerto.
Asimismo, la compañía aérea insiste en que en ningún momento se produjo un incendio en el motor como afirman numerosos viajeros. La compañía indica que como máximo pudo saltar una chispa al producirse la avería.
El avión en el que se produjo el incidente continuaba ayer en el aeropuerto de El Altet y el motor izquierdo ha sido enviado a Finlandia para que se investiguen las causas de la avería y sea reparación, según informaron fuentes de la empresa.
