Jesús fue prendido en Cieza en la noche del Martes Santo. El acto tuvo lugar, como ya es costumbre desde hace decenas de años, en la Plaza del Ayuntamiento, siendo escenificado por los propios cofrades.

Conforme los narradores iban relatando los históricos hechos, los santos fueron dándole imágenes. Tras el Prendimiento, al que puso el colofón el padre Antonio Muñoz Catalán, se organizó la tradicional procesión.