­Los que decidan viajar hoy hasta Cieza van a poder contemplar in situ la gran variedad y calidad de la imaginería con la que cuenta la Semana Santa del municipio. De las 45 imágenes y conjuntos escultóricos con los que conserva la ciudad, las dieciocho cofradías han elegido un total de diecisiete pasos cuyos anderos los llevarán a hombros. Va a ser, por tanto, un auténtico museo andante por las calles de la localidad. El cortejo lo abrirá la imagen de Santa María Magdalena, obra de Joaquín Bagglietto realizada en 1881 y que desfila en un trono que el ciezano ya desaparecido Juan Solano García construyera en 1953. Después asomará por las calles el conjunto escultórico de La Samaritana, esculpido en 1970 por José Luis Planes con un trono de 1980 original también de Juan Solano.

Le seguirá la Oración en el Huerto, el paso titular de la cofradía del mismo nombre conocida popularmente como ´Los Dormis´. Se trata de una obra de 1967 de José Sánchez Lozano con trono de los Hermanos Lorente. Detrás ira La Flagelación, de la Hermandad del Santísimo Cristo de la Agonía. La imagen principal es de Juan González Moreno (1947) y los sayones (1853) de autor desconocido. El trono es de 1896 y lo realizó Gómez Cervantes.

Inmediatamente después tomará las calles La Coronación de Espinas (Francisco romero Zafra, 2009), una imponente obra que viaja sobre un trono de los Hermanos Higuera González. Detrás irán Los Armaos de Cieza pertenecientes a la Cofradía del Tercio Romano y Santo Sepulcro, fundada en el siglo XIX, y serán los teloneros de la Santa Verónica la imagen que Francisco Sánchez Araciel tallara en 1864. El trono es de José Izquierdo de ese mismo año.

El Cristo de la Expiración, del ciezano Antonio Jesús Yuste Navarro, es la obra más joven que se va a poder ver en esta Magna Procesión. Fue realizada en 2013 por encargo de la Hermandad de San Pedro y colocado en un antiguo trono de 1967 de Juan Solano. A continuación de verá al Cristo del Perdón obra de Vicente Benedito del año 1942 y trono de Bonifacio Pérez Ballesteros de 1997.

En el décimo lugar saldrá la Santísima Virgen de los Dolores, del escultor Juan González Moreno y datada en 1945. El trono lo hizo Vicente Segura en 1953. La Santa Cruz, de Javier Bernal, aparecerá después dispuesta en el trono del Santísimo Cristo del Consuelo que realizaran en 1874 Pedro Herrera y Juan Moreno Rodríguez.

El Santísimo Cristo Yacente (José Planes, 1920) también aparecerá en este desfile tan especial. Irá acompañado por la Virgen del Mayor Dolor (Luis Álvarez Duarte, 2004). Ambas imágenes se asientan en un lujoso trono de Antonio Ibáñez Vallés. La imagen de San Juan irá detrás. Fue realizada por Sánchez Araciel en 1880 (la cabeza), José Planes en 1940 (cuerpo) y Juan Carrillo Marco (manos y pies) en 1957.

María Santísima de la Soledad que Juan González Moreno creara en 1942 irá después sobre un trono de Pujante de finales del siglo XIX, y le seguirá Jesús Abriendo las Puertas de los Infiernos (Hernández Navarro, 2001), la imagen que evoca el momento que Jesús descendió a los infiernos, justo antes de resucitar, para liberar a las almas en pena. El trono es de Antonio Soriano Talavera (2001).

Cerrarán el desfile los pasos de Jesús Resucitado (imagen y trono de Manuel Juan Carrillo Marco, 1943); La Aparición de Jesús a María Magdalena (González Moreno, 1972 y trono de Francisco Dato Moreno y José Blaya, 1972); y Nuestra Señora de Gracia y Esperanza, la emotiva imagen que realizara Manuel Carrillo García en 1930 y que desfila sobre trono y bajo palio de Domingo Blázquez.