El Cartagena, un buque para todo y clave para la Armada

Que las historias de Cartagena y la de la Armada están estrechamente unidas es algo innegable, ahora el nombre de la ciudad es también el del último buque multipropósito A-62 adquirido por la Armada, la segunda unidad de la clase ‘Carnota’ y está integrado en el Mando de las Unidades de la Fuerza de Acción Marítima de Cartagena.

La adquisición de estos buques responde a la necesidad de la Armada de renovar su flota de buques auxiliares, los cuales llevan más de cuatro décadas de servicio.

El ‘Cartagena’ fue adquirido por la Armada en septiembre del pasado año a la empresa noruega Vestland Offshore A/S, a través de la intermediaria Navaleva S.L. Este buque fue construido y entregado en 2015 bajo el nombre de «Ocean Fortune» y bandera de Bahamas, por el astillero turco Ceme Shipyard. Originalmente, su misión estaba orientada a realizar tareas de prospección sísmica para la localización de yacimientos de petróleo y gas en el Mar del Norte, y a prestar apoyo a plataformas de extracción de esos recursos, así como a campos eólicos marinos, entre otras actividades.

A lo largo de su servicio en el sector privado tuvo la oportunidad de operar en algunas de las zonas de mayor complejidad del mar del Norte, participando en proyectos de relevancia internacional en la industria energética. Su experiencia en un entorno tan exigente le permitió adquirir características de fiabilidad y robustez que resultan clave para su reconversión en un buque de apoyo para la Armada.

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La dotación del buque está compuesta por 37 hombres y mujeres. En total lo forman 5 oficiales, 6 suboficiales y 26 cabos primeros, cabos y marineros. El personal se ha formado previamente en escuelas como la Escuela Naval Militar de Marín, la escuela de Suboficiales de San Fernando, o la escuela Antonio Escaño de Ferrol. Muchos de los aquí presentes hace ya varios años que terminaron su formación y llevan gran parte de su vida de servicio dedicados a los barcos.

Cometidos

La principal misión de los BMP es adaptar su versatilidad a las necesidades que requiera la Armada en ese momento. Entre los principales cometidos podemos destacar el auxilio a buques en la mar actuando como buque remolcador, el transporte de carga gracias a su amplia cubierta o el apoyo a los destacamentos militares de los territorios nacionales del norte de África.

Además, también puede colaborar en el adiestramiento del resto de unidades de la flota como la Fuerza de Medidas Contraminas, la flotilla de submarinos o los Buques de Acción Marítima. El barco tiene una eslora de casi 70 metros, un calado máximo de 6,2 metros y puede navegar a una velocidad máxima de 13, 2 nudos.

Posee la capacidad de apoyo durante ejercicios y maniobras apoyando a otras unidades de supeficie, actuando como buque minador, de apoyo a buceadores o buque de mando. Otra misión a destacar es la de apoyo a las operaciones con submarinos, con la misión fundamental de buque SAR y recogida de torpedos.

El miércoles 5 de febrero fue recibido por primera vez en el Arsenal de Cartagena, su puerto base, por el Comandante del Mando de las Unidades de la Fuerza de Acción Marítima. En este acto simbólico, además de la bienvenida oficial, se llevó a cabo la toma de posesión de su Comandante, el Capitán de Corbeta cartagenero Carlos Cerdido Aramburu, quien ingresó en la Escuela Naval Militar, tras tres meses de marinería y tropa en San Fernando, en septiembre de 2006, recibiendo el despacho de Alférez de Navío el 16 de julio de 2011.