La Armada y organismos y agencias civiles han aprendido cómo se debe actuar de manera coordinada cuando se incendia un buque en el Puerto de Cartagena. Con la colaboración de efectivos de Cruz Roja, ensayaron la respuesta ante este tipo de accidentes. Se trató de una nueva edición del ejercicio Marsec-2022, que reproduce 13 escenarios diferentes a lo largo de la costa española para lograr el objetivo común de salvaguardar los espacios marítimos nacionales.
Más de un centenar de efectivos se movilizó para auxiliar, a modo de simulacro, a un barco mercante que sufrió un incendio a bordo en las proximidades del puerto y que no podía atracar por sus propios medios. Los equipos contra incendios de la Armada se encargaron de achicar el fuego. Posteriormente se procedió al rescate de los heridos en distintas lanchas, entre las que se encontraba la inaugurada recientemente Salvamar Draco, de Salvamento Marítimo.
Tras a llegar a tierra, los heridos, estudiantes de FP de Protección Civil en el Instituto Claudio Galeno que participaron en el simulacro, fueron trasladados hasta el dispositivo dispuesto por Cruz Roja. Algunos en camilla, otros a pie, unos mostraban seriedad en el simulacro, otros reían a las preguntas de los sanitarios de «¿qué te ha pasado?», tras sacar un papel que indicaba sus dolencias. En primer lugar se realizó un triaje para clasificar a los pacientes en función de la gravedad de sus heridas. Posteriormente se les trasladó a una de las diversas carpas que se dispusieron a lo largo de la terminal de cruceros ‘Juan Sebastián Elcano’ a modo de hospitales. Uno rojo, para los pacientes más críticos, que requerían de una atención inmediata; uno amarillo, para aquellos que, si bien están heridos, no tienen tanta prioridad; y uno verde para los más leves. Tras esto se hizo un registro de los rescatados, de modo que puedan ser hallados fácilmente por sus familiares. Se desplegó también un equipo psicosocial para acompañar tanto a los afectados por la emergencia como a los familiares. El Almirante de Acción Marítima, vicealmirante Juan Luis Sobrino Pérez-Crespo, se mostró «impresionado por los medios que movilizó Cruz Roja» y por «la prontitud» con la que actuó.
Tras atender a todos los rescatados, evacuar a los más graves en ambulancia y dar por controlado el incendio en el buque, se dio por concluido el ejercicio.
El objetivo principal de este simulacro fue el de mejorar la coordinación y cooperación entre las distintas autoridades afectadas ante una emergencia marítima en aguas del Puerto de Cartagena. De modo que, cuando ocurran de verdad, estén entrenados y sepan exactamente cómo debe proceder cada uno.
