Tres parcelas ubicadas en Cala Cortina y Tajo de los Cuervos han sido las elegidas por los profesionales al mando del proyecto piloto que está desarrollando la Autoridad Portuaria en aguas de Cartagena para reforestar posidonia en el fondo marino de la Dársena de Escombreras.

Se trata de dos terrenos a doce metros de profundidad ubicados en el Tajo de los Cuervos y uno en Cala Cortina situada a once metros bajo el mar. Los espacios escogidos responden “a la buena calidad de las aguas portuarias que destacan por su transparencia y profundidad para garantizar el éxito de este proyecto piloto que supondría conseguir por primera vez la reforestación submarina de praderas de posidonia en aguas de un puerto”, explica la presidenta de la Autoridad Portuaria de Cartagena, Yolanda Muñoz.

Con la delimitación de las parcelas donde se llevará a cabo la reforestación, concluye la segunda fase del proyecto, que supone para el Puerto de Cartagena “un reto en materia de sostenibilidad, que nos sitúa como un referente frente al resto de puertos europeos, y que nos permitirá conservar y cuidar nuestro ecosistema marino, en concreto, su flora, y que contribuirá a los efectos del cambio climático, capturando cuatro veces más cantidad de CO2 que las plantas terrestres”, sostiene Muñoz.

Ahora, con los primeros temporales del invierno, los expertos se encargarán de recoger fragmentos de posidonia que serán los que se planten en un punto vigilado a poca profundidad junto a la dársena de Talleres para facilitar su seguimiento. Seguidamente, se reforestarán los tres espacios.

“Si el resultado del proyecto es favorable, se podrá planificar una reforestación a mayor escala que permita regenerar la actual pradera de posidonia que cubre algunas zonas de la costa desde la Punta de la Terrosa hasta Cabo Tiñoso”, indica la presidenta del Puerto de Cartagena. “Con ello podremos aumentar la riqueza biológica de nuestros fondos marinos y reivindicarlos para que sean reconocidos oficialmente como un importante sumidero de carbono”, añade Muñoz.

La Posidonia Oceánica es un alga endémica única en el mar Mediterráneo, considerada entre las plantas fanerógamas, a diferencia de las algas, dispone de hojas, tallo y raíces, aunque también produce flores y frutos. Se calcula que más de 400 especies de vegetales y 1.000 de animales habitan en las praderas de posidonia. Por otro lado, las praderas funcionan como grandes filtradoras, colaborando en mantener el agua marina limpia y transparente.