Vecinos de Cartagena en contra de la tala de la pinada Cuatro Picos llevan concentrados desde las ocho de la mañana del día de ayer para intentar frenar los primeros pasos de las obras. A pesar de sus pancartas, gritos y haber rodeado la excavadora, la pala ha comenzado a arrancar los primeros pinos causando incluso el llanto de impotencia de algunos manifestantes. «Esto es una tortura. Los vecinos estamos desamparados al ver cómo arrancan los pinos y que no podamos hacer nada», lamenta Raúl Pastor, presidente de la Asociación de Vecinos del Barrio de la Concepción.

Los vecinos de la zona, en su mayoría de este barrio, dieron hace dos noches la voz de alarma al ver que comenzaban las obras de construcción de los 28 duplex de lujo en la pinada de Cuatro Picos y se concentraron una treintena frente a la puerta de acceso y llamaron a Policía Local para que revisara los permisos de licencia de la obra. Policía Local informa de que no vieron nada irregular o incompleto ya que la empresa cuenta con toda la documentación y licencias en orden y que solo estaba haciendo acopio de materiales y por eso no avanzaron en las obras.

Ayer, sobre las seis de la mañana, las tareas de desbroce y preparación de terreno para su edificación comenzaron y con ella, la concentración de unos cuarenta vecinos a las ocho de la mañana. «Nuestra vecina nos llamó llorando -yo me asusté- a las siete de la mañana para que fuéramos con ella a intentar frenar las obras», recuerda Conchi García, del Barrio de la Concepción.

En esta ocasión, los manifestantes se personaron dentro del recinto rodeando la excavadora, por lo que el abogado de la promotora malagueña Holprocuma S.L. llamó a Policía Nacional para que cogiera los datos de los vecinos para presentar una denuncia. Por otro lado, los manifestantes llamaron al Seprona para intentar impedir la edificación en este paraje, ya que supone la tala de unos cuarenta árboles. Asimismo, han presentado una denuncia ante la Guardia Civil, que informa que la están investigando y comprobando los permisos.

Urbanismo otorgó la licencia de obra a la promotora el 3 de junio y hace una semana le ofreció una permuta de terreno en un intento fallido de conservar una de las zonas verdes de la ciudad.

Los vecinos, que están «muy dolidos», se concentrarán hoy de nuevo pacíficamente y harán todo lo posible para salvar esta zona de paso de numerosos animales y enclave para la migración de aves.