Las conjeturas de que toda la Región de Murcia e incluso turistas extranjeros iban a aprovechar en masa la suspensión de las procesiones de Semana Santa para ir a pasar unos días de sol y playa se han cumplido a medias.

Las playas, paseos marítimos y restaurantes de la costa murciana se encontraban llenos, especialmente en Viernes Santo, pero «se podía aparcar y había mesas sueltas vacías en las terrazas», coincidían los visitantes que decidieron pasar este Sábado Santo cerca del mar.

Además, los oriundos no han notado una llegada masiva de veraneantes como solía ocurrir en unas vacaciones de Semana Santa alejadas de la influencia de la covid-19, ya que no han podido acudir residentes de otras comunidades autónomas por el cierre de la Comunidad. «Comparado con otros años ha venido muy poca gente», asegura Julia A., residente en Cabo de Palos.

Controles policiales para controlar las medidas covid en los vehículos ayer en La Manga. Juan Caballero

Aunque la afluencia de visitantes ha sido habitual desde el comienzo de este puente, los agentes del dispositivo especial que han realizado constantes controles de acceso a La Manga y Cabo de Palos afirman que el día que más gente acudió a la playa fue en Viernes Santo y la mayoría fueron vecinos de la Región con intención de pasar el día y que, al estar cerrada la Comunidad, se decidían por la costa. La caravana de coches con destino a la costa cartagenera se empezaba a formar desde el Puerto de la Cadena en este día.

En la playa casi toda la gente llevaba mascarilla y algunos dicen que piensan usarla hasta para tomar el sol

Es el caso de las familias Lara y Cutillas, de Jumilla, que decidieron reservar en el Camping de La Manga para estar un día cerca de la playa junto a sus hijos. «Siempre venimos en Semana Santa. Hemos visto bastante gente en la autovía y en los restaurantes», dice Inma Cutillas. «Buscamos aire libre. Somos sanitarias en Jumilla y vemos que la gente respeta las normas de seguridad», añade su compañera de viaje, Mariló Lara. Su marido, Joaquín Jiménez, a pesar de estar en ‘modo vacaciones’ piensa cumplir con la nueva medida de llevar la mascarilla en la arena: «Lo haremos aunque se nos quede la marca en la cara cuando tomemos el sol».

Disfrutar del buen tiempo al aire libre paseando junto al mar para después degustar un arroz caldero o una fritura de pescado era el plan de la mayoría de los que se desplazaron ayer a la costa. Los paseos marítimos y restaurantes lo mostraban sin que hubiera en ellos aglomeraciones. Nelson Eraso, de Cartagena, eligió pasar el Sábado Santo paseando por las playas de La Manga para después ir a una freiduría que le habían recomendado.

Jugar a las palas, al voleibol en la arena, hacer kayak, paddle surf o pescar también fue lo común. Deportistas aficionados aprovecharon estas vacaciones para pasar unos días practicando deportes acuáticos a través de la empresa de eventos 360º. «Nos hospedamos en un hotel de La Manga y estamos realizando diferentes actividades de cuerpo y mente, como puede ser navegar en un barco de vela o yoga en la orilla del mar», afirmaba David Soriano, uno de los creadores de esta 360º. Asimismo, cree que aunque la situación es difícil, él percibe que sus clientes necesitaban desconectar estas vacaciones de la situación sanitaria y conocer a gente nueva practicando deporte en un entorno natural con las correspondientes medidas preventivas.

A su vez, muchos murcianos han aprovechado para revisar que su segunda residencia junto al mar esté conforme la dejaron el verano pasado, ya que el cierre perimetral entre los municipios durante semanas ha impedido a muchos propietarios acudir antes de este puente.

Laura Bueno, de San Pedro, se desplazó ayer a su casa de la playa por este motivo. «Quería vigilar que no hubiera roturas o alguien en mi casa», dice.

El traje típico en las playas durante esta Semana Santa no ha sido el bañador, ya que solo los más valientes se dieron el primer baño de este año 2021 al estar el agua todavía fría y por la presencia de medusas. Eso sí, los paseos por la orilla no han faltado.