El comité de expertos del Plan de Recuperación Ambiental de Suelos Afectados por la Minería (PRASAM) ha finalizado el estudio que prioriza las actuaciones necesarias en las estructuras e instalaciones mineras, en los suelos contaminados en el entorno de los núcleos de población y en la salud de sus habitantes y ramblas con arrastres de metales pesados que desembocan en el Mar Menor. De esta manera han quedado establecidos los objetivos concernientes a minas abandonadas y ramblas y las universidades ultiman lo referente a suelos contaminados en entornos urbanos.
El director general de Medio Ambiente, Francisco Marín, anunció que “se ha venido trabajando para priorizar las actuaciones necesarias a acometer en aquellos emplazamientos que supongan un impacto medioambiental grave o una amenaza al estado ambiental o de seguridad de los espacios protegidos existentes en el Mar Menor y su entorno”.
Así, se da cumplimiento al artículo 75 de la Ley de recuperación y protección del Mar Menor, que establece la “identificación de instalaciones de residuos mineros abandonadas y emplazamientos afectados por la minería metálica con posible impacto ambiental para el Mar Menor”, destacó el director general.
Los objetivos para minas abandonadas y ramblas ya están establecidos, faltan los de entornos urbanos
La priorización de las actuaciones previstas por la Confederación Hidrográfica del Segura son la restauración hidrológico-forestal para la reducción del riesgo de inundación y la mejora ambiental de la rambla de Las Matildes y del Beal, del barranco de Ponce y de la rambla de La Carrasquilla, además del análisis de ramblas secundarias.
En este sentido, “los expertos han validado la priorización de los trabajos, y se les ha vuelto a remitir la resolución definitiva para que puedan programar las actuaciones y proyectos necesarios una vez recibidos los informes remitidos por la Dirección General de Energía y Actividad Industrial, junto con el Instituto Geológico y Minero de España, así como el de la Confederación Hidrográfica del Segura”, indicó Marín.
El estudio sobre estructuras e instalaciones mineras, el informe remitido señala que el Instituto Geológico y Minero elaboró en 2020 un listado nacional con las Instalaciones de Residuos Mineros Abandonadas ordenadas según su grado de peligrosidad o posible afección tanto para el Medio Ambiente como para la seguridad de personas y bienes, que incluye las 73 instalaciones existentes.
Este listado comprende todas las instalaciones de la Región de Murcia que se incluyeron en el inventario actualizado en 2015, de las que diez se emplazan en la Sierra Minera de Cartagena y La Unión y, por tanto, se encuentran en las cuencas vertientes al Mar Menor, que quedan priorizadas a estos efectos de la siguiente forma: En Cartagena la Balsa El Lirio, Balsa Peña del Águila II, Balsa Brunita, Balsa Peña del Águila I, Balsa Encontrada-Ponce, Balsa Pajarillos, y Balsa El Descargador II; en la La Unión Escombrera Sancti Spiritus, Balsa El Descargador I y Balsa Cuesta de las Lajas.
Por lo que se refiere al informe sobre ramblas de la Confederación Hidrográfica del Segura, se indica que tiene previsto llevar a cabo actuaciones de restauración medioambiental en el barranco de Ponce y en las ramblas de Las Matildes, Beal y Carrasquilla. Se señala, igualmente, que el análisis de otras ramblas secundarias del ámbito de la Sierra Minera es una tarea que también entra dentro de las previsiones futuras del organismo de cuenca, “pero actualmente el esfuerzo inversor y de medios personales está concentrado en los cuatro cauces mencionados”.
