La Guardia Civil de Murcia ha detenido a un vecino de Cartagena como presunto autor de los delitos de intrusismo profesional y contra la salud pública al adquirir productos para la elaboración de éxtasis líquido, ha informado este lunes el instituto armado.

El arresto se ha llevado a cabo en virtud de la operación "Imalge", desarrollada por la Benemérita en colaboración con la inspección de farmacia de la Comunidad Autónoma.

La operación se abrió hace unos meses cuando inspectores de farmacia de la Consejería de Salud alertaron a la Guardia Civil de unos hechos relacionados con la adquisición ilícita de medicamentos.

Los funcionarios de la Comunidad, mientras desarrollaban un servicio rutinario de inspección en farmacias, en este caso en el municipio de Cartagena, detectaron que en uno de los establecimientos inspeccionados se había suministrado gran cantidad de un tipo de anestésico.

En concreto, se constató la dispensación de más de un centenar de unidades de un anestésico general inyectable, de 10 mililitros cada dosis, cuyo principio activo es la ketamina, un fármaco de uso médico o veterinario para realizar intervenciones quirúrgicas, aunque no es habitual su uso en tratamientos, y para ser adquirido precisa es indispensable receta médica.

Lo más destacable de este medicamento, concretamente de su principio activo, la ketamina, es que se comercializa como droga en el mercado negro y se suele utilizar para anular la voluntad y personalidad de la persona a la que se le administra para cometer algún tipo de abuso o robos.

Efectivos del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Benemérita abrieron la correspondiente investigación con la finalidad de verificar los hechos y, en su caso, esclarecerlos.

Los primeros pasos de la operación se llevaron a cabo con inspecciones en toda la comarca, más de una veintena de farmacias, para comprobar el alcance de la distribución de este tipo de medicamento, constando que en ninguna, salvo la que dio origen a la apertura de la investigación, había dispensado el medicamento y en algunas no figuraba en sus bases de datos.

Paralelamente a las inspecciones, la Guardia Civil desarrolló otra serie de pesquisas que permitieron identificar a la persona que había adquirido los medicamentos.

Al precisarse prescripción por facultativo, el sospechoso se hacía pasar por veterinario para adquirir los productos, comprobando, gracias a la colaboración del Colegio de Veterinarios de la Región de Murcia, que esta situación laboral era falsa.

Una vez obtenidos todos los indicios necesarios, la Guardia Civil ha localizado y detenido a un vecino de Cartagena como presunto autor de los delitos de delitos de intrusismo profesional y contra la salud pública que, junto con las diligencias instruidas, ha sido puesto a disposición de la autoridad judicial competente.