La formulación de las cuentas anuales de la empresa Lhicarsa para el ejercicio 2019, que debía debatirse durante el Consejo de Administración que se ha celebrado esta mañana, se ha aplazado.

La Auditoría encargada por la empresa, a instancias del Ayuntamiento de Cartagena, coincide en parte con las conclusiones del trabajo de fiscalización llevado a cabo por los técnicos municipales responsables del contrato, que llevan varios meses analizando toda la documentación, así como las actuaciones de Lhicarsa.

Tanto la Auditoría como el informe municipal coinciden en que las cuentas podrían no reflejar la realidad, por lo que la empresa ha decidido retirarlas para aclarar y subsanar todas las cuestiones que generan dudas.

"Hasta que no se resuelvan estas discrepancias, no podemos debatir la formulación de las cuentas. En breve se remitirá nuestro informe a la empresa para que nos presente la documentación que considere oportuna y resuelva todas nuestras dudas", ha indicado la alcaldesa y presidenta del Consejo de Administración, Ana Belén Castejón.

Por otra parte, el Gobierno ha rechazado las propuestas de la empresa en las que se vinculaba la inversión en nueva maquinaria a ampliaciones del contrato y ha pedido que se ejecute la inversión prevista inicialmente.

La alcaldesa ha recordado que en los últimos años son muchas las quejas recibidas por la gestión de Lhicarsa en la limpieza del municipio, que se han trasladado a la misma durante los diferentes consejos de administración que se han celebrado.

"Las soluciones aportadas hasta el momento no han sido satisfactorias. Se pusieron en marcha planes de choque, que fueron coyunturales pero no dieron una respuesta estructural al problema. Además, la propia empresa reconoció que faltaba personal, pero no lo ha resuelto. Son muchas las cuestiones que la empresa debe resolver y así se lo hemos exigido. Como nos comprometimos al inicio de la legislatura, estamos siendo muy rigurosos en el seguimiento de las concesionarias", ha destacado Castejón.