La Plaza de Armas del Arsenal de Cartagena acogió ayer un sencillo pero solemne acto militar, que, enmarcado dentro del día de las Fuerzas Armadas, se hizo en reconocimiento y recuerdo al personal militar y civil, al servicio de la Administración Militar, que ha sido víctima de la pandemia de coronavirus.

En el mismo participaron miembros de la unidades que tienen su base en Cartagena y que entonaron La muerte no es el final en recuerdo a los fallecidos. Una corona de laurel fue además depositada frente a un monolito. Tras este gesto, sonó una salva y el himno de la Armada que interpretó la banda de música del Tercio de Levante.

El acto estuvo presidido por el almirante de Acción Marítima, vicealmirante Juan Luis Sobrino Pérez-Crespo, que estuvo acompañado por el almirante jefe del Arsenal Militar, Pedro Luis de la Puente García-Ganges.

La Armada ha estado muy presente en la lucha en Cartagena contra el coronavirus y sus efectos, ya que han desinfectado distintos recintos en varias ocasiones y han contribuido al reparto de ayuda a familias vulnerables.