La Asociación de Amigos de los Castillos y Fortalezas de Cartagena (AFORCA) ha vuelto a reiterar el peligro de derrumbe en el que se encuentran diversos elementos del patrimonio de fortificaciones y cuya reconstrucción, una vez que se vengan abajo, resultaría mucho más costosa que adoptar ahora las medidas necesarias para su conservación.

Estos elementos enumerados en la 'Lista Roja' publicada en 2018 eran siete, de los que ya dos, el baluarte número 9 de la Muralla de Carlos III en las inmediaciones del acceso a Navantia y los almacenes del Castillo de los Moros, han sufrido derrumbes.

A finales del pasado mes de abril se desplomó parcialmente una de las dos edificaciones que estuvo destinada a almacenes y pertrechos de las piezas de artillería del Castillo de los Moros.

Desde AFORCA se quiere seguir llamando la atención sobre el peligro que acecha al resto construcciones militares defensivas y muy especialmente, por su avanzado deterioro, el cordón del muro aspillerado de entrada a la batería de la Podadera que se sostiene de forma milagrosa y que caerá al fondo del mar, sin que su cesión, alquiler o cambio de titularidad desde el Ministerio de Defensa al Ayuntamiento lo evite.

AFORCA no pasa por alto los malos tiempos que se avecinan por la crisis del coronavirus y que la situación económica relegará, como es lógico, estas posibles actuaciones en favor de la atención social que demandarán los ciudadanos, "pero son ya muchos los años que aguarda este patrimonio para su conservación adecuada y finalmente para su puesta en valor", añaden.

El Ayuntamiento de Cartagena ya es titular del Castillo de Moros, Atalaya, Batería de San Leandro y Fuerte de Despeñaperros. "¿Cambiaría en algo acoger también la batería de la Podadera o el Fuerte de Fajardo?", se preguntan.

"Esperemos que sí y que la penuria económica obligue a nuestros representantes a buscar o gestionar fórmulas alternativas de utilización, conservación o colaboración hasta ahora inexistentes; pero de momento es urgente actuar ya por parte de sus actuales propietarios para evitar un nuevo desplome irreparable de nuestro patrimonio defensivo", han concluido.