Velar por los derechos de los trabajadores municipales y funcionarios que menos ganan. Ese es el espíritu que mueve a la alcaldesa de Cartagena, Ana Belén Castejón, a la hora de afrontar la negociación con los sindicatos tras la anulación del Acuerdo de Condiciones de Trabajo hace un mes y medio. Castejón señaló ayer a La Opinión que el equipo de Gobierno se va a volcar con el personal que menos cobra, como son ordenanzas, conserjes y auxiliares, porque cuando no hay dinero para «ese café para todos» tiene que imperar la solidaridad y velar por las condiciones laborales, sueldo y horarios de trabajo de estos funcionarios y no dar respuesta sólo a un sector, como policías, bomberos o brigadas.

Los sindicatos siguen manteniendo que se puede cumplir con lo pactado aunque se retrasen algunos pagos a otros ejercicios y que van a seguir con su calendario de protestas, que puede extenderse a los actos que se desarrollen en la ciudad. UGT, SIME, CC OO y CSIF crearon un comité de crisis para proponer a policías locales y bomberos no hacer «ni una hora de más» por la supresión del mencionado acuerdo, que afecta a todos los trabajadores municipales, y también por la decisión del Gobierno de no prorrogar el acuerdo conocido como RED (Régimen de Especial Dedicación), que regulaba las horas extra de los más de 300 trabajadores de Policía Local, Bomberos, Brigadas, Deportes, Protección Civil y Prevención.

Más seguridad en las diputaciones

Por otra parte, Castejón se refirió a la sensación de inseguridad que se ha extendido por las diputaciones de Cartagena y que ha motivado una concentración que llevarán a cabo el próximo domingo los vecinos de Pozo Estrecho para solicitar más presencia de la Policía Local y de la Guardia Civil.

Desde el Consistorio afirman que se ha hecho seguimiento de este problema desde el primer momento, porque la Junta Vecinal de esta localidad les ha transmitido su preocupación por la oleada de robos a plena luz del día y con intimidación y con fuerza. Una concentración que apoya el Ayuntamiento, ya que los vecinos «quieren decir alto y claro que no se sienten seguros».

La primera edil explicaba que están trabajando de forma discreta y continua para dar con las personas que están alterando el orden público. También recordó que ellos sólo tienen autoridad sobre la Policía Local y que ha reforzado los controles en barrios y diputaciones. En cuanto al resto de fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, Castejón señaló que había mantenido varias conversaciones telefónicas con el anterior Delegado del Gobierno, Francisco Jiménez, para encontrar respuestas y soluciones, ya que de esta institución dependen estas competencias. La alcaldesa apela ahora al recién nombrado Delegado, José Vélez, a quien «le toca remangarse y encontrar una solución». Castejón añadía que Vélez debe reforzar la seguridad en la zona norte y oeste de Cartagena, pero especialmente en Pozo Estrecho y La Palma.

Habitantes de otras localidades han anunciado que se sumarán a la concentración del domingo porque también les afecta este problema de inseguridad.