El Monasterio de San Ginés de la Jara se vio afectado durante el pasado mes de septiembre por las lluvias torrenciales que tuvieron lugar en diferentes puntos de la Región y que provocaron desperfectos tanto en el edificio principal, como en las Ermitas del Monte Miral que se encuentran alrededor del mismo.

Durante los meses posteriores el Monasterio ha permanecido cerrado y no se ha realizado ninguna intervención. Además, las intensas lluvias que han tenido lugar durante los últimos días en Cartagena han agravado la situación del inmueble y el estado de los muros.

Aunque han tenido que pasar cuatro meses, las obras comenzarán en breve tal y como ha confirmado el Ayuntamiento de Cartagena a LA OPINIÓN. Según palabras del Consistorio, la demora se debe a que el permiso para iniciar las reparaciones "era preceptivo". Recientemente la Dirección General de Bienes Culturales de la Comunidad Autónoma ha autorizado a la actual propietaria del Monasterio, la empresa Hansa Urbana, la reparación de la garita y la restauración de las partes afectadas del muro perimetral. La CARM también ha requerido a Hansa Urbana la documentación necesaria para la definición del tapado de la galería del Monasterio.

Antes de que las obras den comienzo, se procederá a la limpieza de la superficie y retirada de los elementos de arrastre por las lluvias, un trabajo que será supervisado en todo momento por arqueólogos para documentar los restos originales de la garita.

Del mismo modo, el muro perimetral, que fue el elemento más afectado durante la Dana, se someterá en primer lugar a un sondeo arqueológico para poder documentar la existencia de posibles fases de construcción. Una vez finalizado este proceso, se acondicionará el terreno y se excavará la zanja de cimentación, último paso previo a la reconstrucción del elemento más sensible del inmueble.

Por el momento se desconoce si también se atenderán las peticiones vecinales que piden la restauración de las ermitas que rodean el Monasterio y que también son BIC.