Los vecinos de diferentes barrios de la periferia del municipio han puesto de manifiesto su descontento ante la creciente «falta de higiene» en las calles que vienen experimentando desde hace varias semanas. Tal y como explica el presidente de la Asociación de Vecinos de Barrio Peral, Eduardo Martínez, quien asegura que el vecindario «está muy sucio, hay muchísima falta de limpieza». Un problema que se extiende tanto a la vía pública como a los contenedores ubicados alrededor de la barriada.

«Como siempre, los contenedores más viejos están en nuestros barrios», asegura Martínez. Los pedales «no funcionan», explica, lo que provoca que las personas mayores no sean capaces de depositar sus residuos en el interior de los contenedores, ocasionando que las bolsas se queden en el suelo y generen «mal olor». Al que se suma el que generan los propios contenedores, que según Martínez, «no se limpian con la suficiente asiduidad».

Una situación parecida viven los vecinos de Santa Lucía, y es que, como su representante vecinal David García explica, «ya no se salvan ni las vías principales». Desde hace varias semanas, añade, vienen notando un déficit de operarios que ha repercutido en la salubridad de las calles, incluso de las avenidas centrales, que «solían estar limpias». Asimismo, asegura haber reclamado en repetidas ocasiones en este último mes un nuevo contenedor azul para depositar papel y cartón en la calle Santiago, donde «es necesario ya que hay muchos negocios, la mayoría bares, que se ven obligados a dejar las cajas de cartón en el suelo y dan lugar a una gran acumulación de residuos en la vía pública». Sigue sin respuesta.

Las 600 también se encuentra en una situación similar. El presidente de la Asociación de Vecinos de la barriada Virgen de la Caridad, Juan Gómez sostiene que, de un tiempo a esta parte, existe «falta de limpieza en las calles así como de maquinaria» para efectuar dichos trabajos. Y es que, según Gómez, antes la limpieza del barrio se realizada con vehículos de limpieza urbana, mientras que ahora «sólo viene un operario y no da abasto». Un problema agravado por «el olor desagradable» de los cubos de basura.

En San Antón también han sufrido carencias en este sentido. Sin embargo, el representante vecinal, Asensio Albaladejo, insiste en que para facilitar la convivencia es necesario que los vecinos «cumplan con su obligación y depositen la basura dentro de los cubos y no lo hagan a deshoras» clamando por la responsabilidad ciudadana para «facilitar» el trabajo a los operarios.

Esta redacción intentó recabar una explicación del Ayuntamiento sobre la situación, sin conseguirlo.