El procedimiento habitual en este tipo de operación es el siguiente: todos los arrestados son trasladados a dependencias policiales, donde se les toma declaración. Aquellas personas que se habían desplazado a las barriadas en el punto de mira solo con la intención de consumir estupefacientes son dejadas en libertad.
La Policía Nacional llevaba esta mañana a cabo 17 registros en los barrios de Los Mateos, Santa Lucía y Lo Campano, todos en Cartagena, y hallaba varias plantaciones de marihuana y un punto de venta de droga, indican fuentes policiales.
El epicentro de la operación, que estuvo horas en marcha, fue la Plaza José Palmis de la barriada de Lo Campano, conocida por su marginalidad y por las constantes redadas que allí se llevan a cabo, en busca principalmente de estupefacientes.
Asimismo, los agentes decomisaban distintas cantidades de cocaína, dispuestas en dosis para, presumiblemente, ser vendidas a personas, muchas de ellas marginales, que acuden a estos barrios para conseguir la droga a la que son adictas.
Juno a la coca ya cortada, una casa llena de suciedad, cajas de cartones y ceniceros atiborrados de colillas era lo que se encontraban los investigadores de la Policía Nacional, algunos de los cuales cubrían sus rostros con pasamontañas.
La operación comenzó por la mañana y, en la tarde de este miércoles, los agentes llevaban ya ocho arrestos, apuntaban fuentes del Cuerpo, que añadían que la operación continuaba abierta. El despligue fue de la Comisaría de Cartagena, la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) de Murcia y la Unidad de Guías Caninos.
Una maraña de cables colgando del techo ‘recibía’ a los policías que se adentraban en el lugar donde cientos de plantas de ‘maría’, ya crecidas, estaban siendo cuidadas presuntamente por los nacrotraficantes. Los sospechosos habían habilitado todo un garito para dar el mejor trato a sus cultivos y que siguiesen creciendo. Así, tenían instalados varios ventiladores para favorecer la oxigenación de las plantas, así como dispositivos de iluminación, con el fin de garatizar un óptimo y más rápido crecimiento de la cosecha. Se trata de útiles habituales en este tipo de garitos con plantas de marihuana, explican fuentes policiales.
