Los barrenderos se han convertido en el despertador habitual de muchos cartageneros. Las máquinas de limpieza arrancan la jornada con los primeros rayos de sol, lo que provoca que el ruido que generan sea lo primero que escuchan los habitantes de la ciudad; en especial, en zonas como el casco histórico, donde el ruido de las máquinas se magnifica al rebotar en las calles estrechas.

Conocedores de esta problemática, la concesionaria municipal del servicio de limpieza viaria Lhicarsa ha iniciado un plan de inversiones con el fin de incorporar nuevas máquinas menos ruidosas para limpiar la ciudad sin molestar a los vecinos. La inversión de la empresa ronda los dos millones euros. Si bien, los responsables de la misma comentan que no pueden garantizar el ruido cero, reconociendo que las nuevas máquinas, que son «mucho menos ruidosas», seguirán emitiendo sonidos molestos. Algo que apuntan que es «inevitable».

Lhicarsa espera que la totalidad de los nuevos aparatos de limpieza estén en las calles de Cartagena antes de que acabe el año. La firma achaca este plazo a que las máquinas tienen que ser fabricadas, como cuando se encarga un coche en el concesionario. Por el momento ya ha recibido la primera remesa. En ella hay quince sopladoras de mano que funcionan con batería, una gran máquina barredora de aspiraciónequipada con pistola de agua a presión, y una quincena de triciclos eléctricos. Estos últimos vehículos van equipados con un compartimento de carga, y serán utilizados por los barrenderos que en la actualidad limpian las calles con carritos que son empujados por ellos mismos. Además, la empresa ha recibido 320 nuevos contenedores.

Próximamente, Lhicarsa incorporará a su flota los siguientes equipos: un lavacontenedores, un camión de recogida de contenedores, dos camiones con plataforma elevadora, dos furgones con hidrolimpiador, una cisterna regadora para baldear, una máquina fregadora, dos fregadoras a pie, una barredora aspiradora, un camión de barrido, una camioneta pequeña con caja basculante y un tractor equipado para desbrozar la maleza. Además, la empresa recibirá medio millar de papeleras, para instalar nuevas o renovar las actuales.

La concesionaria también destaca que esta renovación de su maquinaria repercutirá en la mejora de las condiciones laborales de sus empleados, que verán como su faena se realiza de una forma más cómoda gracias a la ayuda de estos equipos de «última» tecnología. Asimismo, la firma considera que se mejorará la calidad del servicio. En este sentido, cabe destacar que un informe publicado recientemente por la organización de consumidores OCU sitúa a Cartagena como la sexta ciudad más sucia de España. En esta encuesta de la OCU se pone de manifiesto que los vecinos se quejan principalmente de las pintadas callejeras y los carteles, los excrementos y el estado de las zonas alejadas del casco urbano.