La temporada de cruceros arrancó ayer con la escala del buque Aidamar con 2.686 pasajeros a bordo, que abrió dos meses en los que llegarán a la ciudad unos 20.000 turistas por mar, cuando en años anteriores no había ningún atraque de crucero durante enero y febrero. Una noticia recibida con optimismo por hosteleros y comerciantes, que podrán contar con clientela 'extra' en las once escalas previstas hasta marzo.

De hecho, el presidente del Centro Comercial Abierto, Antonio Sánchez, explicó que la llegada de cruceros es muy positiva para el sector porque, aunque algunos establecimientos no se benefician directamente de la llegada de turistas por mar, sí que sacan provecho del ambiente generado por las escalas, ya que muchos ciudadanos aprovechan esta circunstancia para pasear por el centro. Obviamente, la hostelería y los comercios de suvenires son los locales que más beneficio sacan, de forma potencial, de la llegada de los barcos, pero también las tiendas de moda pueden sumar ventas.

Sánchez recordó que el Centro Comercial también se suma a la campaña de cruceros con la apertura de medio centenar de establecimientos al mediodía ante la llegada de barcos con más de 300 pasajeros.

Los bares y restaurantes también coincidieron en la valoración positiva de adelantar el inicio de las escalas a los meses de invierno, ya que permite compaginar las fiestas navideñas con los cruceristas y paliar la cuesta de enero de los cartageneros.

Los comerciantes también destacaron que tanto el barco de ayer como el previsto en la víspera de Reyes, con 2.163 pasajeros, ayudarán en la campaña de Navidad que, aunque lleva números semejantes al año pasado, confían en que las compras de última hora puedan paliar los efectos negativos sobre el comercio tradicional que tienen las ventas online.