El edificio más antiguo destinado a las proyecciones cinematográficas que se preserva hasta el día de hoy en la Región de Murcia, podría convertirse en una gran biblioteca de carácter regional además de en un espacio dedicado a las artes escénicas.

El Cine Central de Cartagena se construyó en el año 1880 y mantuvo su actividad hasta el año 2000, momento en el que cerró sus puertas dando lugar al abandono del edificio. En el año 2016, la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia adquirió el inmueble con intención de restaurarlo y llevar a cabo proyectos de carácter cultural en su interior. Por ello, a principios de este año la Consejería de Turismo y Cultura encargó a la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT) la realización de un estudio en el que se averiguaran los usos culturales más apropiados que podrían ponerse en funcionamiento en esta edificación.

Así lo transmitieron ayer durante el acto de presentación del trabajo sobre los análisis y usos del edificio del Cine Central la consejera de Turismo y Cultura, Miriam Guardiola; el rector de la UPCT, Alejandro Díaz; y el director del grupo de trabajo que se ha encargado de realizar el estudio, Juan Pedro Sanz, que fueron los elegidos para presidir el acto en el que se desveló la utilidad del inmueble.

El estudio ha sido «un elemento importante para saber el uso que se le va a dar finalmente al espacio» tal y como afirmó el rector de la UPCT, que sin duda supondrá «el desarrollo cultural y social del barrio en el que se encuentra el Cine Central».

El director del grupo de trabajo explicó ayer, a través de una presentación que incluía material gráfico, cómo ha sido el desarrollo de este proyecto. El estudio estaba formado por un grupo de trabajo de siete personas, dos investigadores y cinco recién titulados de la UPCT. Los integrantes han intentado hacer una recopilación gráfica de material inédito perteneciente a la Conserjería acerca del edificio del Cine Central y también del edificio anexo. Posteriormente se dispusieron a analizar las capacidades espaciales del inmueble para así poder proponer con criterio los usos más viables del espacio desde el punto de vista arquitectónico. Tras ello, también tuvieron en consideración las necesidades de la ciudad, procurando que el objeto arquitectónico tuviera una función coherente y necesaria para los habitantes de Cartagena. El informe reveló que la ciudad se encuentra por debajo de la media de la región en cuanto a espacios escénicos y bibliotecas. Por ello, la intención de la Comunidad Autónoma es convertir el Cine Central y el edificio anexo en un espacio dedicado a las artes escénicas y a proyecciones cinematográficas y una biblioteca regional, que podría asemejarse a la ubicada en Juan Carlos I, en la ciudad de Murcia. Juan Pedro Sanz afirmó que se habían tenido en cuenta otros usos tales como el de recuperar la función original del edificio convirtiéndolo de nuevo en un cine, o incluso transformar el inmueble en un museo. Pero la carencia de bibliotecas y espacios escénicos inclinó la balanza.

Edificios históricos reciclados

El Cine Central no sería el único edificio emblemático de la ciudad que ha sido reutilizado a lo largo de tiempo con otros fines, de llevarse finalmente a cabo este proyecto. Existen otras obras de referencia en la ciudad de Cartagena como el Palacio de Aguirre, construcción modernista de Víctor Beltrí, que actualmente es sede de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia y también parte del Museo Regional de Arte Moderno (MURAM). Guardiola sostuvo que era «un placer» que se recuperase «uno de los edificios más emblemáticos de Cartagena» como ya se había hecho con otros inmuebles históricos relevantes de titularidad regional. La consejera aseveró también que «hay que ser cautelosos con el desarrollo del proyecto», por lo que actualmente se desconocen fechas en torno al mismo.