Lo que comenzaba como una acción más de limpieza promovida por parte de la Asociación en Defensa del Entorno Natural de La Azohía (ADELA) acabó ayer con una sorpresa materializada en protesta. Según el portavoz de la entidad, Josué Pérez, la actividad se desarrolló «muy bien, tal como esperábamos aunque con tan solo diez participantes», pero hubo algo que les llamó especialmente la atención: «Lo más destacado ha sido que la mayor parte de basura que hemos encontrado proviene de la iglesia de Isla Plana». Asegura que esta suciedad responde a «los restos que se tiran en las bodas, todo eso que antes era arroz y ahora se ha convertido en confeti, lentejuelas, cosas doradas y plásticos que quedan alrededor de la iglesia y dejan la zona hecha una calamidad».

Ante esto, Pérez ha anunciado que «le pediremos expresamente al cura que se vuelva a la fórmula típica del arroz y los pétalos de flores». Señala que tanto la asociación de vecinos de la población como la propia organización Adela «haremos una instancia para pedir la limpieza de los alrededores de la iglesia por parte de los servicios municipales de limpieza». Además, sostiene que ambos mandarán «un escrito a la iglesia para pedir que sustituyan los confetis y que los prohíban directamente». «Si tenemos que dirigirnos al obispado, lo haremos», añade.

En total, el portavoz de ADELA informó de que recogieron «entre 40 y 50 kilos de residuos». Entre ellos, resaltó también que «hay una zona de acantilado donde se ve que hacen botelleo y hay un montonazo de restos de vidrio», ante lo que indica que «daremos parte para que el servicio del litoral del Ayuntamiento pueda limpiarlo».

Preparados para el verano

Josué Pérez, como «usuario» de esta zona del litoral poniente de La Azohía e Isla Plana, entiende que «las playas están preparadas para el verano, están limpias y el servicio municipal lo tiene todo preparado». Aunque manifiesta que «se ven algunos restos de algas por algunas zonas de los temporales», insiste en que lo ve «todo preparado y dispuesto para recibir a los veraneantes».

Recuerda, además, que «nosotros en la limpieza que hacemos - se trata de una acción anual - buscamos una zona por donde no pasan los servicios municipales». El pasado año, por ejemplo, se centraron en el área que se entiende desde el palmeral de San Ginés hasta la salida de rambla Honda en Isla Plana, donde declara que «tendremos que volver a incidir porque había mucho plástico de invernadero, pero no se ha hecho nada y está otra vez igual». Propone «intentar pedir una cita con la empresa agrícola para plantear la recogida de la senda y que vengan ellos con nosotros, que se preocupen de recogerlos», concluye.