La Autoridad Portuaria de Cartagena, dentro de las actuaciones que está realizando estos últimos tres años, está llevando a cabo la mejora en la carretera de servicio que va desde Cartagena a Escombreras. Actualmente se trabaja en varios tramos, entre ellos el que va desde la Grúa Sansón hasta la Curra, donde se va a incluir un nuevo alumbrado.

Debido a la necesidad de construir una nueva canalización del sistema para la instalación de nuevas farolas es imprescindible la demolición de las actuales canalizaciones, así como el desmontaje de farolas y la realización de nuevas cimentaciones. Por ello, desde hoy, 7 de mayo, hasta el 7 de junio no va a funcionar el actual alumbrado público.

Hasta la puesta en servicio de nuevo se han colocado tres focos sobre el Centro de Transformación en el muelle de San Pedro y se han girado algunos focos de varias torres para no ocasionar problemas, pero la iluminación será menor a la habitual.

Camino a la sostenibilidad

El presidente de la Autoridad Portuaria, Joaquín Segado, señaló que «la mejora del alumbrado público con la instalación de luces tipo LED contribuye a la eficiencia energética al ser de bajo consumo, con lo que también contribuimos a otro de nuestros objetivos: ser el puerto más sostenible».

Esta actuación se inició en diciembre del pasado año con el objetivo de mejorar y remodelar el tramo de 1,5 kilómetros que transcurre desde Grúa Sansón hasta la Curra con el objetivo de avanzar en el proceso de integración del puerto en la ciudad de Cartagena, dando continuidad a las obras ya realizada en el entorno urbano de Santa Lucía y las que se están ejecutando en la carretera que lleva a Cala Cortina y Escombreras.

«Además de nuestro compromiso de integrar el puerto en la ciudad, con estas mejoras recuperaremos un espacio para los ciudadanos de Cartagena, integrando la fachada portuaria en la trama urbana» indicó Segado.

Se trata de una adecuación integral del entorno con el fin de impulsar la accesibilidad peatonal y disminuir las barreras arquitectónicas, así como la creación de una zona deportiva, dotada de mobiliario específico y carriles para bici y corredores, un área para el estacionamiento de autobuses, y la colocación de arbolado creando itinerarios con sombra.